DESVIRGANDO UNA PENDEJA - Relatos Eróticos

DESVIRGANDO UNA PENDEJA

... abrazo mientras nos devorábamos la boca. La llevé al cuarto y la desnudé torpemente y me lancé sobre ella para penetrarla de una estocada hasta el fondo. Estaba tan bien lubricada que solo gimió de placer. La empecé a bombear con fuerza mientras le comía sus fantásticas tetas. Luego la hice cambiar de posición en varias oportunidades hasta dejarla en 4 y sacudirla con todas mis fuerzas, y esta vez logramos llegar juntos. Mientras nos relajamos le empecé a tocar el tema de cuidarnos, así que calculamos sus fechas y estábamos al límite, así que acordamos usar preservativos para estos momentos. Lo volvimos a hacer aquella siesta haciendo que ella me monte y aprenda a cabalgar, estaba dispuesto a enseñarle de todo a esta pendeja fatal.
Teníamos 3 encuentros en la semana así que cogíamos a lo loco, cuando le hice que me chupe la verga, recién tomo dimensión del pedazo de carne que se estaba devorando ya que solo podía tragarse la cabeza. Me tardé 6 meses en poder romperle el orto, pero ahora tengo una pendeja experta en el sexo que me satisface de manera increíble.