mi primita sara
Fecha: 30/12/2020,
Categorías:
Incesto
Tus Relatos
Autor: anonimo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Acababa de preparar mis cosas para el fin de semana fuera, mientras mi mujer hacia lo mismo con sus cosas. Estaba dividido, siempre era agradable ver a mis padres, pero odiaba las bodas, no lo que implicaban como muchos ya que yo no tenía mala experiencia en eso. Ya llevaba diez años casado con Susana y no nos iba mal. Odiaba la parafernalia de las bodas.
Salimos a las siete de casa y esperaba llegar a las nueve por ahí a casa de mis padres, como vivíamos lejos aprovechábamos en irnos el viernes y así nos quedábamos hasta el domingo.
Susana se durmió a mitad del camino y tras mirarla pensé en lo acertado de haberla conocido y haberme casado con ella. Era una mujer estupenda y lo que más me gustaba de ella era su independencia, esa era sagrada al igual que la mía.
No nos atosigábamos, cada uno tenía sus espacios libres del otro. Ella tenía su trabajo y sus compañeras al igual que yo. Aunque salíamos en parejas también disfrutábamos de cosas por separado. No me gustan para nada esos matrimonios que lo hacen todo juntos, creo que eso quema a la pareja y más que unirlos los separa.
Nosotros casi nunca peleábamos, si es cierto que ambos éramos más bien fríos y también es cierto que jamás sentimos esa pasión arrolladora que parece consumirte según dicen. En contrapartida nos llevábamos estupendamente.
Si es cierto que a veces, sobre todo en la cama echaba de menos esa pasión que te desborda, pero tampoco puedo quejarme del sexo, ya que era continuo y bueno, aunque como ...
... dije sin estridencias, a nuestro gusto. (Que equivocado estaba)
Llegamos a casa de mis padres y ambos nos recibieron encantados, dentro mis tíos también cenaban con nosotros. La noche estuvo muy bien, ya al final de la misma mis tíos comentaron si podríamos ayudarles a encontrar una habitación para Sara, durante tres meses iba hacer unos cursillos en la uni cerca de donde nosotros vivíamos.
Sara era mi prima pequeña, con la que no tenía mucho trato ya que por edades apenas coincidimos. Primero por mis estudios y luego por mi boda. Además me parecía una niña insufrible, entre sus padres y los míos la habían mimado en exceso.
Mi primita Sara
-Podría quedarse en casa –dijo Susana sin pensarlo- verdad cari?
-Por mi… -dije resignado-
No me hacía gracia, además llevaba con la tontería tres o cuatro años sin verla, Susana la vio hace unos meses en otra celebración a la que no acudí por estar fuera.
-De verdad nos harían ese favor? –dijo mi tía extasiada-
-Claro tía, no te preocupes –no podía negarme, adoraba a mis tíos-
Al día siguiente en la boda, estaba en la barra y me fije en como una chica y el novio hablaban acaloradamente, aunque disimularan se notaba que había familiaridad entre ellos.
Más tarde decidí investigar por mi cuenta y salí del salón buscando un baño. Me metí en uno de la planta de abajo del hotel y al final de un largo pasillo.
Estando dentro de uno de los reservados se apagó mi luz y en ese momento entro alguien, mire por la rendija y la vi. Era la ...