UN DÍA DE REYES
Fecha: 04/01/2021,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: anónimo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Este relato es verídico y ya casi se cumple un año de ocurrido. Vivo en una colonia de Iztapalapa en CDXM (México), en ese entonces tenía 29 años y tenía novio. Yo solía navegar por Grindr, la famosa app de encuentros sexuales gay con personas que viven cerca de ti, y aunque tenía novio, debo admitir que por semana al menos cogía con dos chavos diferentes ya sea cerca de mi zona o en otros lugares (lo sé, fui un maldito infiel).
Todo comenzó meses atrás, por allá de agosto de 2019, antes de tener novio. Había encontrado a unas cuadras de mí a un chavito recién llegado a la colonia, no tenía papá, sólo venía con su mamá y su hermana (quien tiene dos hijas pequeñas) y rentaban muy cerca de mí. Un sábado estuvimos a punto de vernos en mi casa pero por "x" razón nunca apareció y desapareció de la app. El tiempo pasó y llegamos a enero de 2020, recien iniciado el año, como cada semana yo estaba urgido de tener sexo con alguien, mi novio vivía al sur de la CDMX y lo veía sólo fines de semana por lo general. Ese 5 de enero como eso de las 6:30 pm vi en la app a aquel chico con un mensaje muy provocador en su perfil, decía que estaba solo y quería pasar el rato, estrenarse ya que era virgen. Inmediatamente le mandé mensaje y le mandé nuevas fotos mías para que se animara, él aceptó, pero esta vez no sería el encuentro en mi casa como meses atrás estaba planeado, sino en su propia casa.
Tomé rápidamente un baño, preparé el lubricante y mis preservativos. Salí corriendo a casa ...
... de este muchachito y toqué su puerta a las 7 en punto. Para mi sopresa, cuando salió, era hermoso: delgado, de anteojos, cabello corto, más bajito que yo y facciones entre varoniles y juveniles. Sólo había un inconveniente... tenía apenas 15 años.
Él estaba dispuesto a tener su primera vez, quería hacerlo y estaba muy emocionado, yo estaba algo confundido, con miedo, ¿qué tal si era una especie de trampa o algo así? ¡ERA UN MENOR!
- Oye, pero eres casi un niño - le dije. Se sonrojó un poco y vi decepción en su rostro.
- Perdón. Si quieres irte, no hay problema.
La forma tan tierna en que me lo dijo me conmovió un poco y quise arriesgarme, después de todo también necesitaba coger (infiel a fin de cuentas, y sexo gay es sexo gay). Me quité mi abrigo (me encanta usar un abrigo negro en épocas de frío) y lo coloqué en el sillón de su salita, después me senté ahí mismo. El lugar donde rentaba era pequeño: apenas entrando al cuarto estaba la salita, un pequeño comedor, en el cuarto de a lado una cocina pequeña, en otro el baño y al fondo las camas de la mamá, la hermana y una litera para él y sus sobrinitas, justo detrás de la salita.
- ¿Dónde están tu mamá y tu hermana? - pregunté.
- ¿Las conoces? - me respondió algo espantado.
- No. Hace meses ya habíamos platicado en Grindr y me contaste que eran recién llegados, ¿no lo recuerdas?
- ¡Ah, ya! No recuerdo mucho pero creo que si - se sentó a lado de mí en el sofá - pues se fueron hace un par de horas a casa de ...