La hija del presidente - Relatos Eróticos

La hija del presidente

... estaba en remodelaciones la persona que compartiría conmigo había rechazado el cuarto y pedido un cambio.

A pesar de todo fue un buen día, un cuarto solo para mi, un baño prácticamente privado y un piso donde solo estaría yo! 

Junte ambas camas individuales y me hice de una cama grande, me desvestí pues había sudado de tanto maniobrar por la construcción y me dirigí a tomar una ducha caliente, después me quite la toalla y me recosté desnudo sobre mi cama donde me quede en un profundo y cómodo sueño.

Capítulo 2 -Primer día de clases

Ya me había acomodado en mi nuevo hogar, bajé temprano y ya arreglado al comedor para desayunar, después me encaminé hacia mi salón (4A) para comenzar mis clases.

Nervioso no alcanza a describir  cómo me sentía, era el comienzo de mi primer año de preparatoria, estaba lejos de mi familia, no conocía a nadie y temía de como me trataría la élite de compañeros de mi salón. 

Poco a poco comenzaban a llegar, chicas y jóvenes muy bien arreglados que portaban celulares de último modelo, joyas, chamarras y zapatos caros sobre su uniforme que fácilmente valían más de lo que la casa donde antes vivía con mis padres y hermanos!

Yo estaba en el pasillo de brazos cruzados esperando a ver qué hacían los demás, comenzaron a entrar al salón, me encamine detrás de ellos para después dirigirme hacía la banca que parecía libre, estaba frente al escritorio del profesor y nadie lo ocupaba. Escuchaba que murmuraban que yo era el nuevo, que ...

... murmuraban que estaba mal vestido, que el de intendencia traía mejores zapatos y luego se acercó el grupo de los “boys” ,que son ese típico grupo de pesados engreídos que disfrutan molestar y pasarle por encima a la gente y que sienten que el mundo les pertenece, se acercaron y me empezaron a molestar.
En cuestión de segundos ya tenia 30 apodos diferentes y no podía esperar a que llegara el profesor.

Paso el día y ya estaba en la última clase, me metieron sapes, pusieron apodos, y me hicieron pasar un día muy pesado pero mi naturaleza gentil y buena me hizo contenerme para no buscar pelea. La profesora no podía limpiar el pizarron y me mando a buscar alcohol por ser el de la banca de enfrente, para mi era una oportunidad de poder respirar, salí del salón para ir a buscar el limpiador y justo cuando bajaba las escaleras alcancé a sentir como me empujaban.

Cuando me di la vuelta pensé que detrás de mí estaría alguno de los “boys” y creí que tendría que enfrentarme contra uno o varios pero para mi sorpresa era una chica que parecía estar huyendo… una chica con un cuerpo increíble, delgada pero con un buen culo que parecía bastante firme y que apenas podía ser contenido por la falda del uniforme escolar, traía puesta una sudadera sobre su blusa que a pesar de estar abotonada dejaba ver algo de su bra con sus tetas de tamaño mediano que robotaban al ritmo que bajaba los escalones, la sudadera cubría la mayoría de su cabello negro, su rostro era delicado, labios algo gruesos, ...