Unas vacaciones con mi madre - Relatos Eróticos

Unas vacaciones con mi madre

... en la pregunta que me hizo.

*¿Tiré de la cadena?
*¿Me limpié bien?
*¿Me habría escuchado?
*¿Sabía algo de la paja?

Muchas preguntas y de nuevo solo ella sabía la respuesta. Finalmente me dormí pero no estaba tranquilo del todo.

Me desperté por la mañana y mi madre ya se había levantado. Fui al baño y me lavé la cara e hice pis. Llegué al salón y la encontré desayunando y con mi desayuno a su lado.

-Buenos días mamá!

-Buenos días! Te he preparado el desayuno.

Me senté en la mesa y ella recogió su sitio. Se fue al cuarto y volvió a los pocos minutos con un nuevo bikini puesto.

-Dime que te parece este bikini, me lo compré antes de venir y no me lo había probado - dijo mientras se giraba sobre sí misma y posando un poco.

Era otro como el del día anterior, muy juvenil, apretado y pequeño. Este era rojo con rayas blancas horizontales.

-Es parecido al que llevastes ayer, no?

-Si, son parecidos. ¿Te gusta? 

-Si, te queda bastante bien.

-Pues cuando termines, prepárate que nos vamos a la playa.

Se dio la vuelta y regresó al cuarto. Terminé de desayunar y fui a cambiarme, cuando entré en la habitación estaba ella lista ya mirando el móvil en la cama. Cogí el bañador y me cambié allí mismo dándole la espalda.

-Estás listo ya? - preguntó.

-Si, vámonos.

Cogimos las cosas y caminamos hacia nuestro lugar en la arena. Dejamos las toallas y las bolsas y fuimos directos al agua. Nadamos un ratito sin alejarnos y jugamos. Salimos del agua ...

... después de un tiempo porque nos empezamos a arrugar las manos y nos tumbamos en nuestras inseparables hamacas.

-Me estoy poniendo morena o necesito una semanita más? - preguntó bromeando.

-Yo estaría otra semanita - contesté siguiendo la broma.

-Yo también, que se me está haciendo muy corta.

-Jajaja - reímos los dos por la broma.

Se quitó la parte de arriba del bikini como era ya su costumbre, yo intentaba no ser muy descarado mirando pero era imposible. Con los ojos fijos en sus pechos, mamá levantó la cabeza y me miró.

-Qué pasa hijo, ni que nunca me hubieras visto las tetas?? - dijo ella.

Me puse rojo de vergüenza y no sabía que contestar, entonces me volvió la pregunta de que si estaba morena.

-No, es que se te están poniendo morenas también.

-Te gustan así??

-Si, morenas están mejor.

-Ya lo creo.

Ya empezaba a excitarme y me tumbé boca abajo. Cerraba los ojos y lo único en que pensaba era en sus tetas y si los abría las tenía delante. Estaba atrapado en mi excitación. Me puse una toalla en la cabeza y miré para el otro lado todo el tiempo que pude hasta dormirme. Dormí como una hora y media más o menos según el reloj.

Al despertar lo primero que hice fue quitarme la toalla de la cabeza y darme la vuelta. En ese momento me quedé en blanco, no sabía lo que estaba pasando, solamente miré. Mi madre estaba tomando el sol completamente desnuda, sin bikini ni nada, boca arriba. No me acostumbro a verla así, y mucho menos depilada de esa forma ...