1. El chófer, las francesas y uno más...


    Fecha: 31/12/2017, Categorías: Sexo en Grupo Autor: caroltruco, Fuente: RelatosEróticos

    ... Genaro... madredelamorhermoso... gracias Genaro... diosssssssssss!!!!!!!!!
    
    Ahhhhhhhhh!!!!!!!!!! y fue la corrida más rica de su vida, la más disfrutada y la más inesperada....
    
    Y casi a la vez las francesitas hicieron lo mismo en la cara de Genaro. Primero una se estremeció y lo empapó mientras su amiga se deleitaba en sus pezones y hacía que se arqueara como una gata...
    
    Y luego Genaro en trance siguió con la otra para terminar la faena como un señor... Eso sí, antes la levantó, le dio la vuelta como a un trapo, pues a esas alturas no había asomo de voluntad; la apoyó en el respaldo y a cuatro patas le metió la lengua por el ano de la chica. La mató del placer.
    
    Saboreaba el agujerito y ella gemía como loca...
    
    La amiga miraba extasiada como alquel patán degustaba el culito de su compañera, que cada vez se abría más. Se regalaba enterito, todo lo redondo que era.
    
    Y ahora, vente en mi cara, zorrita mía, mójame los bigotes como ella, chorréamelos... le dijo a la chica a la vez que la giraba de golpe y se escondía entre sus piernas como antes.
    
    No tardó ni dos segundos la chica en gritar y en trastabillar palabras en francés o en sabe dios qué y en agarrarle los pelos y restregarlo contra sí. Y en caer rendida después de temblar en un orgasmo exquisito...
    
    Raquel no podía apartar la vista. Ufffffff... menudo placer. En la vida le había pasado algo tan excitante. Su propia peli porno en las cámaras de seguridad. Casi compensaba los turnos de mierda que le ...
    ... había tocado hacer esa semana.
    
    Si no fuera porque estaba tremendamente cansada se habría vuelto a masturbar.
    
    Guardó todo en la cabeza para futuras pajillas, cómo no.
    
    Genaro se levantó y casi les dio en la cara con el falo hinchado y duro como roca. Ahora queridas, se van a tragar esto, les dijo picaronamente sin que ellas entendieran un carajo. La cara hinchada y sobrada de él parecía decir: Como esta en tu vida la has visto, nena.
    
    Y casi podemos decir que de esa envergadura no la habían visto las chiquitas. Casi seguro...
    
    Ellas agradecidas y muuuuuuy bien educadas, tiradas y deshechas, pero contentas y felices, comenzaron a mamarle el palo presurosas. Se lo repartían, entraba y salía, cada vez más mojado y lleno de babas y burbujitas.
    
    Una se afanó en metérselo lo más a dentro posible y la otra se dedicó en exclusiva a chupetear la piel de los huevitos sin tregua.
    
    Y Genaro allí plantado, sin perder la chulería, en su papel, seguro de que las volvía locas (y locas las había vuelto) pensaba: joder, joder, joder, ya estaba tardando en pasarme algo así...
    
    Y las sujetó a las dos por la cabeza, Venga, perritas, que todo este rabo es para vosotras solas. A comer, a comer bien, no dejéis ni un rincón sin lengua, nenas.
    
    Las chicas lo hacían tan bien y él había aguantado tanto que cuando gritó Me corro!!!!!!!!!
    
    no les dio tiempo a quitarse siquiera un poco y las inundó de semen. Las puso perdiditas, hechas un cromo, a lo que ellas respondieron a carcajada ...