1. Los blanquísimos jamones 3


    Fecha: 07/02/2021, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... de culo! Araceli tenía razón. ¡Son hermosísimas! ¡Bellezas perfectas de los cuarenta! Toda la razón del mundo. Difícil, muy difícil ser indiferente, neutral, imparcial. ¡Qué sé yo!
    Por suerte estaba Araceli y me las presentó.
    -Ella es mi tía, Patricia y ella…
    -La tía supletoria…, Romina… - La misma “tía” se presentó y me saludó sonriendo.
    -Es así ingeniero. Araceli nos habló maravilla de usted… - Esta era Patricia. - ¡Jajaja! Nos asombró mucho que Araceli tuviera tanto conocimiento de ingeniería.
    -No, no. Araceli me dijo que no iba hablar de mis condiciones profesionales con ustedes…
    -¡Jajaja! Entonces tenemos que concluir que la “apreciación” no pasa por lo profesional… ¿no lo cree?
    -Araceli ha sido extremadamente amable conmigo. Supongo que le habrá dicho que yo fui una “aparición divina” o algo así.
    -¡Jajaja! “Aviso del destino” nos dijo.
    -En serio ingeniero. Nos habló muy bien de usted, de su gentileza, su amabilidad…, y el “aviso del destino” le dijo que usted sería el profesional adecuado a lo que nosotras necesitamos.
    -Y no tenemos por qué ignorar su “iluminación”. – Parecía que le había caído muy bien a “las tías”. Gracias a Araceli.
    -Señoras…, creo que ustedes tendrían que conocer mis antecedentes. – E iba a sacar la hoja con los antecedentes, los más importantes.
    -En principio no nos llame “señoras”. Somos Romina y Patricia. Así nomás. Y vamos a ver lo que queremos hacer y lo que usted pueda decirnos al respecto.
    Todo fue fácil y sencillo. Me mostraron ...
    ... toda la documentación de una obra bastante compleja por la audacia arquitectónica que habían desplegado las “señoras”. En definitiva, muy inteligente la actitud de Romina y Patricia. “Los pingos se ven en la cancha”. Les di mi opinión sobre el tipo de análisis estructural había que hacer, y el tipo de estructura más conveniente. Les gustó mi opinión. ¡Quedaron satisfechas!
    -¡Quedaron encantadas! ¡Te lo dije! ¡Te adoran!
    Fue lo primero que me dijo Araceli cuando nos encontramos el atardecer siguiente.
    -¿Dónde querés que vayamos?
    -Al hotel, claro. ¡No aguanto más tenerte lejos!
    -¿Y vamos hablar de “tus tías”?
    -¡Ma’ qué tías! Vamos hablar de nosotros, de lo que hicimos, y de lo que haremos. Y si tenemos la boca ocupada y no podemos hablar no importa. ¡Vamos ya! – Y con su risa gloriosa, me tomó del brazo y paró el primer taxi que pasó.
    Estaba súper caliente. Supongo que habría de todo para hacer. Pensaba en su culo. 
    Bien lo hicimos arriba, debajo, de costado, 69, montada. Esta vez me pidió que no acabara adentro, porque era arriesgado, porque estaba cerca de los días fértiles.
    -Quiero decir no adentro de mi conchita…, pero podés hacerlo adentro de mi boquita.
    -O de tu culito.
    -¿Ahora? Uy…
    -No, no será ahora. Te voy a decir cómo prepararte. 
    -Si, dale.
    -Pero ahora móntate que quiero jugar al “llanero solitario”.
    -¿Qué es eso?
    Ja, ella no sabía. Demasiado joven.
    -Una vieja historieta de mi infancia. Ahora no hablemos. Móntate y cabalgá. Te aviso cuando me viene. ...