Luis, Jacobo y un verano 04 Julio enseña su poderío de macho
Fecha: 12/01/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Alvaro-L-de-H, Fuente: SexoSinTabues
... mamándole la polla y disfrutando de su sabor, reverenciándole y humillado dispuesto a darle placer, a ser su esclavo, su puto, a hacer lo que él mandara desde aquel momento en que me envicié del sabor, la textura y el tamaña de su verga. No tuve que chupar mucho más, le notaba como temblaban sus piernas y su respirar angustiado anunciaba la llegada del inminente orgasmo, cabalgaba el placer por su verga hasta explotar en mi boca. Eyaculó con fuerza dos o tres veces en chorros largos y potentes que llenaron mi boca y tuve que tragar aprisa para que no cayeran manchando mi camisa, y gocé de lo último que le salía más espeso y pastoso que el volumen del principio. La mancha que aparecía en mi pantalón era señal de que me había corrido por el simple hecho de mamar su polla y el placer que me había producido. Cuando solté su verga, no quería, pero las rodillas me dolían, se subió la ropa con rapidez y su polla desapareció de mi vista. Me levanté y quedé enfrente de él, ya no sonreía, creo que tenía miedo de lo que pudiera suceder ahora que el momento de éxtasis y locura había pasado. -No pasa nada Julio, me ha gustado mamártela. –la luz volvió a sus ojos que se habían vuelto mortecinos. Acabábamos de traspasar una nueva frontera en nuestra amistad y connivencias. Así comenzó lo mío con Julio, lo nuestro mejor dicho porque era recíproco, en realidad esto fue el primer contacto sexual entre nosotros aunque mi atracción hacia él comenzó antes. Hace más de un mes, cuando llegamos y ...
... le vi lo miraba de diferente manera que otros años, sus hombros habían anchado mucho, ya superaba en tamaño y fuerza a Bruno y también se estaba volviendo muy guapo, varonil, algo tosco, todo un macho del campo, me impactó. Hacía seis meses que tuvimos el primer encuentro mi primo Jacobo y yo y nos confesamos a mi tío, en este tiempo habían sucedido muchas cosas que contaré, si lo recuerdo y no me hago un lío. Quiero dejar claro que lo que pasó esta tarde era consecuencia de mi interés en otro sentido por él, no era todo sexo, desde el momento en que le vi cuando llegamos a la hacienda, y sabiendo ya bien mis tendencias me enamoré como un perdido, hasta mis primos lo notaban. La escena de la caseta fue una orquestación de Jacobo con la colaboración de Bruno para ofrecerme en bandeja a Julio. Como siempre, mi primo había hecho trabajar a su imaginación y su cabeza para contentar y dar satisfacción a su amante ocasional. Se rompieron los tabúes. Julio, desde ese momento, era uno más de nosotros, se interponía el respeto, ¿miedo?, ancestral, casi religioso, que sentía él, y todo el mundo, hacia mis abuelos. A la noche en nuestra habitación le pregunté a Bruno el sentido de “El tonto”, seguía sin entenderlo, se echo a reír divertido por mi ignorancia. -En el pueblo hay un dicho popular, “No hay tonto con polla pequeña”. Nos pudimos reír los tres, en este caso de mí que resultaba el más tonto de verdad. -------------------- El paseo resultó delicioso, atravesamos el río por una ...