La mamá de mi compañero de la Universidad. Me enamoré.
Fecha: 06/03/2021,
Categorías:
Sexo con Maduras
Tus Relatos
Autor: locoxmary, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... llevó en su auto muy moderno, fuimos a su casa, mi amigo no estaba en ese momento, pues el tenía novia y se mantenía con ella. Entramos y era tanta la atracción que en ese momento había que cuando ella cerró la puerta, yo la tomé de la mano, la abracé y la besé, luego le pedí disculpas por hacer eso, pero le dije que no aguantaba más. Ella me dijo -tan bello-, me jaló y de nuevo nos besamos, esta vez muy apasionadamente, que rico besaba janeth, nuestras lenguas se entrelazaban con mucha pasión, entramos abrazados y con nuestras bocas unidas haciendo sonidos, la puse contra la pared y le fui quitando su saco, luego bajé su sostén y comencé a besar y chupar sus grandes senos, los mamé con mucha fuerza, sus pezones se erectaron y se pusieron como tornillos gruesos. La bella Janeth solo gemía y se dejaba hacer todo lo que yo quería. Fui bajando por su vientre luego me fui directo a los muslos que dejaba afuera de la falda, los olí y luego los besé, fui subiendo su falda y llegué a su pantaleta, era muy sexy tipo bikini, olí su sexo y le di una lluvia de besos sobre él en la parte encima de su rajita, bajé de nuevo a sus muslos y los besé y con la nariz tocaba su rajita siempre encima de su braga. Todo era tan erótico. Oí los primeros gemidos de Janeth, quiere decir que yo iba con el camino correcto. Subi la boca a su pantaleta y con boca tomé un borde y se lo bajé con los dientes, tenia sumamente depilada su rajita con muy pocos pelitos, apenas una porción encima de su ...
... clítoris. Me lancé con la boca sobre su rajita, lamí y chupé sus labios vaginales y ella perdió la compostura y me tomó por la cabeza y empezó a jalarme el cabello al mismo tiempo que gemía ahora ya descontroladamente. -asi cariño, asi, asi, qué rico!!-.
Mientras le comía de pie la rajita, yo le tomaba con las manos sus dos nalgas, que buenas estaban, aún duritas y redondas, las apreté y las acariciaba. Janeth se recostó mejor en la pared y abrió más sus piernas. Tuve mejor acceso a su raja, me la estaba comiendo toda, seguí mamando y logré meterme más y mi lengua tuvo acceso al ojete de su culito, fue la gloria, me volví loco lamiendo su ano. Ella también me demostró que tenía sensible su ano, pues comenzó a gemir con más fuerza y me pedía que siguiera lamiéndosela. Entonces yo la voltee, la puse contra la pared y ahora me quedaron sus nalgas de frente, le quité completamente la falda y la braguita, y comencé a comerme sus nalgas, las mordía, las mamaba y chupaba con los labios. Le abrí sus dos grandes carnes y ahora lamí directamente su ano. Ya no eran gemidos los que daba Janeth sino alaridos, la cuestión era tan caliente, que inserté un dedo en su raja mientras seguía lamiendo su ojete. Sentí como sus músculos se contraian y su respiración aumentó, Janeth se corría en ese momento. Eso me puso a mil, que me puse pie, saqué mi verga de mis pantalones, y colocándose en la raja la penetré sin piedad, le follé duro olvidando que era una mujer madura, es decir la cogí ...