1. ¡Esa tarta de manzanas! 2


    Fecha: 26/04/2021, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... hermanitas. Sonrieron cuando me vieron. Pero nada más. ¡Cómo si supieran que tenía que reponerme! Esperaba desayunar tranquilo…, pero apareció Kirky. ¡No me iba a dejar en paz!
    -¿Puedo compartir tu tarta de manzanas?
    -Por supuesto…
    -Que simpática es tu… esposa…, novia… ¿amante?
    -Es mi pareja. Eso es todo…
    -Eso… ¿Sabés? Es hermosa y simpatiquísima e inteligente…, y además… muy joven… Apenas tiene un año más que yo. Suponía que te gustaban mujeres… más…, bueno…, experimentadas…
    -Me gustan todas…, las que me gustan…
    -Ahh… ¿por eso te sentiste tan bien las dos únicas veces qué tuvimos sexo?
    -No hablés más de ese tema, por favor. Déjame vivir en paz… - No quería ser agresivo, pero me estaba pudriendo.
    -No lo hago para molestarte. Por favor, no creas eso. Ya bastante daño me hice a mí misma…
    	Quedé en silencio, mirando para otro lado. No quería alentar ningún comentario más.
    -No lo tomés a mal, por favor…, y no pretendo seducirte. ¡Jamás lo haría! Ya te hice bastante daño. Además tu… pareja es encantadora. – Kirky se había movido, como para tener mis ojos frente suyo. – Pero quiero que lo sepas… No fue solamente un capricho, lo que hice para molestar a mamá. También se lo expliqué… a ella…, y a Araceli también…
    -¿Qué cosa?
    -Estaba celosa… 
    -¿Cómo?
    -En esos momentos de bronca no me di cuenta…, pero cuando te fuiste lo comprendí. Te extrañaba… ¡estaba celosa de mi madre! ¡Ella te tenía y yo no!
    -¡No digás pavadas!
    -¡Es cierto Dani! ¡Te lo juro! ¡Me gustabas ...
    ... mucho! 
    -¡¿Eso le dijiste a Ari?!
    -Si… - Kirky agachó la cabeza…, como si de veras tuviera vergüenza…
    -¿Por qué Kirky? ¿Por qué? ¿Por qué querés seguir jodiéndome la vida?
    -¡Noooo…! ¡Para nada! ¡Solo quiero qué lo sepas! Se lo dije a Araceli…
    -¡También querés joderla a ella!
    -¡No, no, noooo! Ella sabe muy bien que la amás más qué a nada en el mundo… Está muy segura de ella y de vos. Lo hablamos… y… sabemos, las dos…, que el placer… y el sexo… no es lo mismo que el amor…
    	No entendía adónde quería llegar con tanta charla. ¡Estaba chiflada! Si es cierto todo lo que decía…, y que lo había hablado con Araceli…, bueno…, podía ser el motivo de su calentura. ¡Cómo para asegurarse que nadie podría competir con ella!
    	¡Seguro qué era así!
    -Voy al agua…, hasta luego… - Ni en pedo le iba decir ¿me acompañás?
    	Ni tiempo para pestañar le di. Me levanté y me fui.
    	Ninguna novedad, por suerte. A la hora, más o menos, vino Araceli.
    -¡Hola mi amor! – Estaba tan cariñosa como siempre. Nadamos unos minutos, para allá, para acá… y Ari, en su mejor manera, se sumergió…, me descubrió el pene por el costado del pantaloncito y se mandó una rápida mamadita…
    -¡Esperá! ¡No terminé! – Inspiró, llenando sus pulmones, y se sumergió nuevamente. La mamada fue más persistente y efectiva. La pija quedo bien dura. Emergió, respiró hondo, se corrió la bikini y se enterró contra mí. Una buena cabalgata, tomada de mi cuello y mi cintura…, y hermosas acabadas… ¡Todo bien! ¡Como siempre! ¡Ari no tenía ...
«1234...11»