1. Vanessa: Una ingenua ama de casa.


    Fecha: 02/06/2021, Categorías: Voyerismo Tus Relatos Autor: Albert Raymond, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... qué? Contestó aquel hombre, ya entrado en años y con unas presentes, pero escasas canas.
    —Porque me he quedado sin jabón y sólo tengo lo suficiente para limpiar esto.
    —Lo lamento mucho, no ha sido mi intención, me distraje un poco.—Dijo el caballero, mientras se acomodaba con su silla apuntando directamente a donde estaba Vanessa, para ver "cómo limpiaba".
    —No se preocupe, está bien. —decía ella mientras se ponía de rodillas, para posteriormente ponerse a cuatro patas y comenzar a tallar con fuerza, dejando ver con más claridad su ropa íntima bajo su uniforme.
    —Muchas gracias, es usted muy amable señorita.—Decía él mientras se acomodaba la verga que ya comenzaba a crecer bajo su pantalón de mezclilla.
    —Dígame Vanessa, ese es mi nombre… ¿Y con qué se distrajo?—Preguntó con curiosidad.
    —Muy bien, mucho gusto Vanessa, yo me llamo Damián. Y me distraje porque se me antojó un biscocho... De esos que tienes ahí en la vitrina.—Dijo Damián con una sonrisa burlona y con un tono sarcástico, que pasó desapercibido para la ingenua Vanessa.
    —Oh, ya veo. Lo siento mucho, pero ya cerraron la caja con llave y no le puedo vender ese biscocho que tanto se le apetece.
    —No se preocupe—Dijo Damián casi babeando al ver semejante culo moviéndose en un vaiven mientras Vanessa restregaba el piso, dándose cuenta que Vanessa era... o muy puta o muy ingenua, ya que no se había percatado de que le estaba enseñando todo el culo a su cliente.
    —Listo, ya acabé. 
    Vanessa se puso de pie y ...
    ... fue a dejar sus artículos de limpieza a la parte posterior, mientras el viejo zorro de Damián ya planeaba su siguiente movimiento. Recordó lo que  Vanessa había dicho hace unos instantes y rápidamente se apuró a derramar el café que le quedaba en la taza.
    —Aaahh soy un tonto—Exclamó Damián en voz alta, para que Vanessa se percatara.
    —¿Qué ha ocurrido?—Preguntó Vanessa al llegar corriendo a la escena.
    —Perdóneme señorita, quiero decir Vanessa. Soy un idiota, un tarado, otra vez lo volví a hacer, no fue mi intención.
    —No se preocupe, fue un accidente, usted no es esas cosas. —Esbozó una sonrisa Vanessa, para que el pobre hombre no se sintiera mal.—El problema es que ya no tengo jabón para limpiar.
    Damián se quedó con cara de pensativo un momento, como para convencer a Vanessa de que se le acababa de ocurrir.
    —Ah, ahora que me acuerdo yo traigo un poco de jabón líquido aquí.—Dijo Damián sonando lo más natural que pudo.
    —¿En serio?—Dijo Vanessa con cara de asombro.
    —Si, justamente lo traigo porque soy propenso a accidentes como estos, donde termino manchado o manchando otras cosas.—Soltó Damián con una sonrisa "apenada".
    —Pues, me gustaría que me de un poco para terminar de limpiar.
    —Es que... El envase es un poco complicado. 
    —¿Cómo es eso?—Dijo Vanessa.
    —Pues verá... Conoce esos envases con un pivote que se levanta y usted tiene que apachurrar el envase para que salga el jabón. Como el jabón líquido de trastes.
    —Pues claro.—Dijo Vanessa—Pero no le veo lo ...