1. MIS BAJAS PASIONES (EL TRABAJO I)


    Fecha: 23/01/2018, Categorías: Hetero Autor: XCITANTDLC, Fuente: SexoSinTabues

    ... entregué completa, lo abracé rodeándolo por el cuello y ahora fui yo quien lo empezó a besar, abrí mis labios para recibir su lengua que empezó a girar y hurgar dentro de mi boca, nuestra saliva se mezclaba mientras sentía sus manos ahora encima de mi culo, me apretaba las nalgas con fuerza haciendo que me parara sobre las puntas de mis pies al mismo tiempo en que sentía su dura verga tocarme por encima de mi rajita. No pude soportar mucho tiempo y empecé a desabrocharle la camisa, con una mano abría sus botones uno por uno y la otra la dirigí hacia su verga, se la apretaba y acariciaba por encima de su pantalón provocando en mí algunos gemidos, se sentía de muy buen tamaño y eso me encantaba, Pedro con una mano empujaba mi cabeza hacia abajo para que me apurara a llegar a su pene. Cuando terminé de desabrochar su camisa continué con su pantalón, traía una hebilla muy grande en su cinturón y sin darme cuenta también la besé, así que mejor me separé un poco para abrir su pantalón; empecé a besar y tocar su verga por encima de sus calzoncillos, era enorme pero no pude estar segura hasta que la liberé por completo y la tuve entre mis manos. Me puse de rodillas frente aquel palo que se erguía enorme ante mí, parecía que iba a adorarlo y realmente lo merecía, era de muy buen tamaño, considerablemente más grande que el de mi novio y de los últimos que había visto. Lo empecé a besar con delicadeza recorriéndolo de arriba abajo, con mi lengua lo recorrí por todo su gran tamaño y ...
    ... le lamí sus huevos, lo tomé con mis manos y lo apreté contra mis mejillas con una gran devoción, pareciera que estuviera enamorada de esa verga y la verdad es que poco faltaba para que así fuera. Me la metí en la boca y empecé a cumplir con mi tarea de la mejor manera, mi cabeza la movía lentamente saboreando y disfrutando cada centímetro de carne que tenía entre mis labios, me lo embutía por completo sintiendo sus vellos en mi cara y con mi lengua jugaba con él, qué bárbara, que puta tan exquisita eres, es la mejor mamada de verga que me han dado, te encanta, verdad, cométela completa puta, es tuya, se ve que te fascina mamar vergas, aaaaaaahhh. No me importaba lo que me dijera, me sentía feliz y era verdad todo lo que me decía. Se escuchó un ruido pero de momento no me importó mucho, seguí disfrutando mi tarea sintiéndome realizada con ese pene en mi boca moviendo mi cabeza sin necesidad de que Pedro me la tocara. Con una mano me quité el cabello que tenía sobre mi cara y al abrir los ojos me di cuenta que estaban tres señores frente a nosotros viéndonos, estaban parados a nomás de 3 metros de distancia y veían perfectamente como le estaba mamando la verga a don Pedro. Desconozco cuanto tiempo llevaban ahí pero no serían más de 3 ó 4 minutos, tiempo más que suficiente para darse cuenta que nadie me obligaba a hacer lo que estaba haciendo y que, sobretodo, lo disfrutaba como una loca. No supe que hacer, estaba muy sorprendida pero no me saqué de la boca la verga que estaba ...
«12...567...»