Con quien menos lo imaginé, el muchacho más guapo y mujeriego. Segunda parte.
Fecha: 19/07/2021,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: soyAriel, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Como contaba en el relato anterior acepté ir al departamento de Arturo a jugar videojuegos, en el camino iba nervioso y ansioso, sentía que mi pecho palpitaba, recordaba lo que había pasado en el viaje de regreso del sábado anterior, en el cual se había aprovechado mientras estaba "dormido".
Llegamos a su departamento, realmente no era muy grande pero agradable, una pequeña salita y un comedor, sólo tenía una recámara, pero mucho más grande que la mía, con una enorme cama King Size y hasta con vestidor, junto a la cama su escritorio con su computadora y una silla ejecutiva, sin faltar un enorme espejo de pared en una de las paredes.
Su televisión se encontraba en su recámara y era de pared, así que entramos a la recamara y nos acostamos sobre el colchón, de muy buena calidad, por cierto, cómodo y suave.
No pude evitar pensar en todas las mujeres que habrían estado en ese colchón, si el colchón hablara, pensé, seguramente muy usado.
Tomamos los controles y empezamos a jugar, realmente no era muy aficionado a los videojuegos, pero me defendía, mis dos compañeros de departamento si eran muy aficionados y a veces jugaba con ellos.
Llevábamos algunos minutos jugando cuando me soltó:
- Sabes Ariel, te tengo que hacer una confesión.
- Dime Arturo, te escucho - respondí. mirándolo a la cara y dejando de jugar.
Vi sus grandes ojos expresivos de color miel y me dijo.
- La verdad no sé cómo empezar, ¿recuerdas el viaje después del partido del ...
... sábado?
- Si, como olvidarlo, ja, ja, reímos mucho con que se te puso dura la verga, soñando con una chica.
Adiviné por donde iba la confesión, pero no podía delatar que no había estado dormido.
- Es queeee, creo me propasé contigo y necesito pedirte disculpas.
- ¿Cómo no entiendo?- respondí, fingiendo no entender.
- Es que tienes unas nalgas muy suaves y bonitas y me puse muy cachondo, no pude evitar que mi verga se pusiera dura, te estuve acariciando las nalgas y te metí un dedo en el culo, aprovechando que estabas un poco bebido.
Deseaba la verga de Arturo, pero no podía ser obvio, tenía que defender mi "virilidad", tampoco quería que todo mundo supiera que me gustaba la verga, por lo que seguí escuchando, deseando saber en que terminaría todo.
- ¿Que dices?, porque me hiciste eso, soy tu amigo- reclamé "enojado".
- Si, perdóname, sé que no estuvo bien, pero el roce de tus nalgas en mi verga me volvió loco, tus nalgas son muy lindas y suaves, sueño en las noches con ellas, desde que te vi la colita en las duchas y me hago unas pajas tremendas pensando en ella, y lo del viernes fue el acabose, estuve oliendo el dedo que te metí en el culo toda la noche del sábado y domingo, y me hice unas pajas tremendas, me excitó tanto, y en la noche me desquité con Sandra (una de sus conquistas) y le di por el culo pero pensando en el tuyo.
- Cochino, oliendo un dedo con olor a mierda. - respondí, pero me excitó mucho que se haya cogido a una de las tantas chicas de su harem ...