1. Profe y alumno machito


    Fecha: 25/07/2021, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Alberto, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... del ombligo hasta su pubis, los pezones eran rositas y los tenía paraditos, tenía pelitos negros en las axilas y su vello púbico estaba muy abundante. 
    Yair se hincó frente a mí y empezó a besar mi paquete por encima de mi pantalón de vestir. Mi verga estaba llorando presemen en tanta cantidad que me molestaba el sentir mi ropa mojada. Por eso preferí bajarme el pantalón, junto con mi ropa interior, y mi verga salió disparada llenado la cara de Yair de pre. Él se zampó inmediatamente mi herramienta de carne en la boca y yo sentía su lengua jugar con la punta de mi cabeza de vez en cuando. 
    Intentaba meterse mi verga hasta el fondo, pero como sí la tengo grande, pues el no podía y terminaba ahogándose con mi palote en su garganta. Sacó la verga de su boca con un sonido de chupetón y luego la levantó para arriba para dejar a la vista mis bolas peludas. El muchacho puso cara de asco, pero de todos modos se lanzó a comerme las pelotas como putita. Me daba besitos en los huevos, y me pasaba la lengua por todo el escroto. Luego se metía una bola en la boca y me la mamaba para después seguir con la otra. Yo estaba en la gloria. Yair era un excelente mamador, mucho mejor que mi mujer o cualquier otra mujer con la que había estado. 
    Regresó a mamarme la verga y al poco rato empecé a sentir la leche que ya llegaba. No le dije nada y sin avisarle le di de tomar toda la leche que me había sacado como un becerrito hambriento de verga. Intentó sacarse la verga de la boca, pero yo lo ...
    ... detuve con las manos y lo obligué a tragarse toda mi corrida.
    Cuando se despegó Yair tosió muy fuerte y tenía los ojos llorosos. Yo pensé que quizá podrían haberlo escuchado. Pero no me importó y mi calentura pudo más. 
    Lo levanté de las axilas y lo acerqué a mi boca para besarlo.
    Y: No beso hombres.
    A: ¿Vas a querer que te pase?
    Yair, de mala gana y cerrando los ojos, levantó un poco los labios y yo me lancé a besarlo. ¡Dios! Que ricos labios tenía el carajito. Su boca sabía a mi propia leche y el beso fue suficientemente excitante para volver a parar mi verga que ya pedía un segundo round. 
    Sin dejar de besarlo lo acerqué más a mi cuerpo y sentía como sus pezoncitos parados rosaban con mi pecho, y su verga dormida  se pegaba con mi verga y mis huevos. Puse mis manos en sus nalgas y empecé a amasarlas. Le di un par de nalgadas, y noté que él se quejaba. 
    A: Es hora de tu examen anal 
    Le dije que se pusiera en cuatro patas, y el muy obediente así lo hizo.
    Yo bajé hasta el suelo y vi la preciosidad que me iba a comer. Me llegaba un intenso aroma a sudor adolescente y esperma, seguramente Yair se la había jalado ese mismo día en la mañana. Le di un beso en una nalga y escuché que Yair decía “esto está mal”, para no dejarlo escapar, separé sus nalgotas con las manos y lancé mi boca a su boquete anal. El chico soltó un gemido de placer y noté que su piel se le erizó. Estaba dándole un beso negro en un lugar que nadie había tocado antes, más que él cuando se bañaba, quiero ...