EL REGALO DE CUMPEAÑOS PARA MI MARIDO
Fecha: 07/09/2021,
Categorías:
Infidelidad
Tus Relatos
Autor: Etelvina69, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... mi lencería fina, rendida ante este gran macho, a los pies de la cama donde dormía intensamente mi marido, engullía todo lo que podía de esa gran verga morena, larga, gruesa, venuda con dos bolas colgando las cuales de vez en cuando pasaban a alojarse en mi boca golosa. Le di una gran mamada proporcionando placer y haciéndome sentir una mujer sexy, hambrienta, ¡una gran puta! ¡zorra! ¡sucia!
Después de un rato mamándole el pito, durante el cual mi macho emitía gruñidos bestiales de gozo y donde yo lo miraba fijamente mientras hacía mi labor regocijándome de ver el placer que le proporcionaba y de vez en cuando volteaba a ver a mi marido profundamente dormido y al que le comenzaban a salir unos cuernos preciosos. No era la primera vez que lo hacía con otro, varias veces, en la casa, en el hotel, en su propia cama, pero como que comparado con esta ocasión aquello no había sido nada, to creo que los cuernos no le habían brotado bien como hoy.
Mi negro me quiso llevar al mueble pro yo consideré más morboso y excitante hacerlo en la misma cama donde dormía mi querido maridito, así que me levanté y tomándolo de la mano le di un estironcito para llevarlo al aposento. Movió con facilidad a mi marido colocándolo en una orilla y de frente a donde fornicaríamos. Me hizo el calzoncito a un lado y me dio una repasada con su lengua hasta que me hizo venir estremeciéndome y arqueando el cuerpo emití gemidos de gozo sin reprimirme, luego me bajó esa prenda lentamente gozando de la ...
... vista. ¡Me encanta que me bajen el calzón! Su gran miembro lo movió alrededor de mi hoyito que ya pronto se ensancharía mucho, luego con cuidado, lo fue introduciendo en la posición del misionero, hasta que finalmente lo introdujo todo, yo grité, gemí y me llene de carne y gozo.
Estuvo bombeándome durante algunos minutos con todo su corpachón encima de mí, yo abrazando su espalda, gozando agarrando sus hombros y brazos, luego bajaba mis manos hacia su hermoso trasero y lo agarraba con fuerzas como queriendo hacer más intensas sus embestidas que me satisfacían con creces, sentía toda mi cueva intensamente llena de carne maciza. Por momentos me besaba con intensidad, me lamía el cuello y me chupaba el lóbulo de la oreja, luego se ponía en posición de lagartija y yo con mis piernas bien abiertas deseando que me metiera las bolas y todo su cuerpo dentro del mío. Me chupaba con intensidad los senos gozándome y haciendo gozar por completo, luego se colocaba de rodillas colocando mies extremidades en sus hombros o abriéndome el compás hasta sus límites. Luego dejó de embestirme y yo presta le di otra gran mamada tragándome sus jugos y los míos, sin ascos, algo que nunca había hecho, pero hoy estaba sumamente sucia.
Después de unos momentos de chupársela lo coloqué de espaldas y me convertí en la dueña del control, con calma le tomé el garrote, lo restregué en la entrada de mi vagina y luego me introduje solo la cabeza. Me quedé quieta y luego poco a poco, me fui sentando en ese viril ...