PEQUEÑA OBSESION - Relatos Eróticos

PEQUEÑA OBSESION

... ni siquiera pensé en eso si no en disfrutar el momento. Entonces no mentiste del todo, el chico se avergonzó y asintiendo la cabeza dijo, si en parte, no les vaya a decir a los demás profe, descuida será nuestro secreto, entonces eres casi virgen, vaya, y por qué no has continuado con tu amigo Beto, Ya no quiere profe, se molesto mucho conmigo por haberme venido en su boca, y creo que tiene razón no debería sentir eso por un amigo, Ok mira, el sexo se hizo para disfrutar, si te hace sentir bien no es malo, si no le haces daño a ninguna otra persona tampoco es malo, y si te cuidas pues menos es malo, debes de experimentar y después pensar que te pareció la experiencia para poder decidir si te gusta o no, ¿Y bueno lo de las travestis, a que se debe, que es lo que te gusta de ellas? Pues sus cuerpos y las cosas que usan, sus falditas y sus medias y como se les ven sus piernas y sus nalgas, ¿Estoy mal profe? No Charly para nada, tener gustos diferentes no es estar mal, bueno y que piensas hacer? No lo sé pero no he dejado de pensar en eso, en verdad fue muy rico, he pensado en pedirle a Beto que me lo vuelva a hacer, y prometerle que esta vez le voy a avisar, pero ya ni me habla y tengo miedo que él vaya a decir algo. No te preocupes no dirá nada él tiene más que perder que tú, y en cuanto a pedirle que vuelva a hacer algo que deseas, no es el único créeme. Para estas alturas de la plática yo ya estaba al mil por hora, el saber que el chico ya había probado sutilmente las ...

... delicias del sexo gay y que le había gustado me ponía cada vez mas y mas cachondo, ya es tarde le dije, tus padres se pueden preocupar es hora de que te vayas a casa, si muchas gracias por haber platicado conmigo Profe, por nada muchacho, cuando quieras, se que mañana es sábado pero me gustaría seguir platicando con Usted, podría venir mañana a su casa? Claro Charly, que te parece a las 6 de la tarde? si mañana estaré a esa hora. Desde que se fue ese viernes y hasta que lo recibí ese sábado no deje de pensar en él, y como si fuera a buscar una aventura me prepare, me metí a bañar dos horas antes, me lave el culo por dentro y revise mi depilado, cuando salí, faltaba escasa media hora, para que Juan Carlos llegara, me puse un body con liguero negro con morado, medias al muslo, y una tanguita de dos triangulitos, uno adelante y uno más pequeño atrás, arriba solo me puse un suéter con cremallera al frente y abajo un pantalón apretado muy apretado que dibujaba la silueta de mis piernas y mis nalgas, cuando Juan Carlos llego corrí a recibirlo, me saludo y no pudo evitar dirigir la vista a mis piernas y mis nalgas, eso me dio seguridad de saber que iba por buen camino, le ofrecí un refresco el acepto y se sentó, empezamos a platicar, el no dejaba de ver mis nalgas cada vez que me levanta a hacer algo, tenía que darle una señal que conmigo podía tener todo eso que no pudo y no disfruto con su amigo Beto, así que cuando en la plática volvió a salir el tema de los travestis y del sexo oral, ...