Mi primer salida a la calle como Paulina
Fecha: 19/02/2018,
Categorías:
Microrelatos,
Autor: PaulinatvCDMX, Fuente: CuentoRelatos
... los ojos y con la cabeza le decía que no y el preguntaba:
A- Por qué no?
Yo no sé de dónde se me ocurrió decirle:
P- Pues, es que ando en mis días.
Entonces el me soltó. Hice el intento por caminar pero el no se hizo a un lado, le dije lloriqueando:
P- Oye! ya déjame ir, ya hice lo que me pediste!
Entonces él se hizo a un lado y yo comencé a caminar, pero él siguió caminando junto a mí, asustada acelere mi paso rumbo a mi casa pensando que en unos metros más desistiría y me dejaría ir, pero no fue así, ya cuando faltaba una calle para llegar a mi casa, me detuve y le dije:
P-Oye! ya, por favor no me sigas!
A lo que el me contesto:
A- Ok, pero dame el último beso.
Yo me detuve, me recargué en un coche y le dije que le daría su beso, el repegó su cuerpo al mío obligándome casi a sentarme en el coche, me abrazó y acercó su cara a la mía, pero no me besó, me miró a los ojos y sin decir palabra me tomó de la cintura, me sentó bien en el auto y comenzó a acariciarme mis piernas y mis nalgas, yo luchaba con sus manos y le amenacé con gritar, y le dije:
P- Mira, están despiertos ahí, déjame o grito.
El volteó y miró a la casa que yo le señalaba, la cual tenía luces encendidas, dejó de luchar pero no quito las manos de mis piernas, luego me tomó por la cintura con una de sus manos y me comenzó a besar la mejilla, con la otra intentaba separarme las rodillas y me dice:
A- sólo abre tus piernas, no te va a pasar nada, traes tus mallas puestas, ...
... aunque yo lo quisiera no te puedo coger así, además la neta no me gusta hacerla al vampiro, pero ya me tienes bien caliente, no seas mala, sólo déjame bajar la calentura, si?Podemos entrar a ese parquecito?
Me señaló una pequeña zona de juegos que se encontraba en la esquina de mi casa justo frente a donde estábamos nosotros, no me había percatado de esto, pero debíamos estar dando un muy buen espectáculo en caso de que hubiera algun miron, además este hombre parecía que no iba a conformarse con un no, así que pensando en mi seguridad y previniendo que alguien pudiera llamar a una patrulla, accedí a movernos a la pequeña zona de juegos, aunque debo confesar que también sus palabras me habían puesto muy cachonda, así que nos adentramos en este lugar ya mencionado y hasta atras había una zona de mesas como de tipo pic nic, yo me senté sobre una de ellas y él volvió a colocarse de frente a mi, por lo que esta vez no dude en hacer lo que previamente me había pedido, yo abrí mis piernas y él se colocó entre ellas y se repegó a mí, y continuo con el delicioso faje que me estaba dando, de pronto, el quiso subirme la falda, pero como yo estaba sentada en la mesa, no pudo hacerlo completamente, solo dejó al descubierto una mayor zona de mis leggins y mis muslos, los cuales comenzó a acariciar lentamente, yo me dejé llevar, sus manos me estaban enloqueciendo, sus labios y los míos se fundieron en uno de los más apasionados besos que me habían dado hasta entonces, aprovechando que me ...