1. Me titulé de puta: Visitando de nuevo a la madrota


    Fecha: 19/02/2018, Categorías: Incesto Autor: Elzita Zorrita, Fuente: CuentoRelatos

    ... al baño...
    
    Y salió. Después me contó que subió al entrepiso para verme sola, ya lo esperaba la madrota.
    
    No me diferenciaba de las otras pirujas y cuando se vino el que estaba follándome otro cabrón se acercó acariciándome suavemente las nalgas, me deje hacer medio dudando, medio indecisa como viendo si mi primito cabron regresaba:
    
    - ¡A ver hijita… dame esas nalguitas! y me la dejo ir...
    
    Pensaba:
    
    -Este pendejo me está dejando sola, ya me sospechaba que iba a querer verme coger con otros. (Pendejo el, o pendeja yo?) Le voy a demostrar que ya se hacer lo que sea, que voy a dejar que me coja el que quiera, como estas putas… De seguro me está viendo.
    
    Además, la verga que me están metiendo está muy sabrosa
    
    A seguir con calma, el güey me fue metiendo la mano y también la verga. Como es de habitual, pronto todas las parejas ya estaban cogiendo o mamando y cambiando de pareja. Una de las pirujas ya clavada agachada, otra cogida de a ranita… Otra mamando.
    
    - Otro pepino metido… ya perdí la cuenta… ¡creo que estoy siendo muy puta! ¿Creo…?
    
    Otro tipo me recostó en un sofá, y sin decir nada, ya sabiendo cómo era, abrí las piernas ofreciendo la raja, el tipo, sin dudar, me clavó el puñal hasta la empuñadura, solo cerraba los ojos y pujaba, pensando: ¡Y otro! ¡Chinga y chinga! Creo que ya me estoy acostumbrando
    
    El vecino de joda aprovechando y sin dejar de follar a otra, me cachondeaba… Al terminar oí que uno de ellos comentaba:
    
    - ¡Qué buena nalga tiene esta ...
    ... caraja! Dura, dura y la sabe mover…
    
    Después de esos palos, ya puesta en ese camino me cogieron otras dos veces, en diferentes posiciones, una agachada mamando otra verga y otra de lado.
    
    Me sentía muy a gusto encuerada y cogiendo, sin preocupación o vergüenzas. Igual que las otras zorras.
    
    Cuando terminó de venirse el quinto cabrón y me enderece, me abrazaba murmurándome al oído:
    
    - Estás linda amor, he visto todo ¡y has sido fantástica! ¡Te adoro amoooor!
    
    Le dije sonriendo:
    
    -¿Por qué no venías…? ¡Cabrón!
    
    - Para verte cogiendo amor… (¿Hablando groserías cariño?) Estás cogiendo de a madres hijita, ya van cinco palos, que pinche putota eres cabrona…!
    
    - ¿Y crees que ahora te voy a dejar metérmela?
    
    - Siii, por favor amooorrr, te quiero meter la verga hasta el fondo… de castigo por dejarte sola
    
    - Jajaja, ¡qué chistoso! ¿Crees que soy qué? ¿Una… puta…?
    
    - Pues sí… creo que sí…
    
    - Bueno… pues si… es cierto… en ese caso ¿Cómo quieres que me ponga?
    
    - Dándome el culo cariño… Es lo que te falta dar hoy…
    
    Sin decir nada puse las nalgas en pompa y con una mano me acomode con cuidado su garrote en mi culantro y me lo fue encajando… ya sabíamos muy bien cómo hacerlo. Y me entraba facilito…
    
    A la salida la madrota me dijo:
    
    -Me gustó como estuviste muchachita, cuando quieras venir la casa está abierta para ti…
    
    - Gracias, respondí sonriendo tranquila.
    
    Al otro día, tomando un cafecito y comentando la noche me dijo:
    
    - Cariño, hay algo que no sé ...