Negación - Capítulo 3
Fecha: 23/04/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: Gonza-Neg, Fuente: CuentoRelatos
... mientras me daba golpes en el estómago y yo me alejaba riendo.
- Déjame Brawny, no quiero empezar tarde…
- Seguro… – Me dio un medio abrazo y se inclinó un poco, dejando su boca junto a mi oreja, para hablarme en susurros – Haz ese paso donde haces que muevan el culo, por favor, iré a mirar la clase hoy… ¿siiiiii?
- Ja Ja – le dije mientras lo alejaba de un empujón – Ya preparé la clase, de seguro vas a poder distraer la vista con más cosas.
- ¡Ese es mi hermano! – me agarró dejando mi cabeza entre su brazo, mientras desordenaba mi pelo.
- Tranquilo, tranquilo – le dije riendo – Suéltame, o nunca llegaré y nunca verás nada.
- Tienes razón.
Una de las chicas, se acercó a pedirle consejos respecto a su rutina de ejercicios y aproveché el momento para hacer mutis por la escena, estaba por poner un pie en el pasillo, cuando me gritó.
- ¡¡Ey!! ¡¡Enano!! No te olvides… - sonrió y elevó una ceja, y su cara de niño bueno se había ido, había un demonio ahí. Negué con la cabeza mientras me volteaba y levante mi mano, mostrándole el dedo medio.
- Que mal Enano, que mal – Me gritó.
El salón de baile era amplio, una sala de espejos. La multitud que acostumbraba entrar a mis clases se encontraba sentada, separados en grupos de conversación, reían. Y eso me contagiaba de energías. Cuando entre todos miraron a la puerta. Extendí mis manos, como preguntando ¿Qué pasa aquí? todos se pusieron de pie. Me reí mientras me acercaba al equipo musical al otro lado de ...
... la sala. Mientras caminaba miré la cantidad de botellas puestas en el piso marcando territorio, me encantaba esa competencia que se generaba por ocupar los lugares cerca a los espejos, en especial las mujeres, que podían ser pretenciosas y competitivas a morir.
Comencé a prepararme, haciendo las conexiones necesarias, mientras mis “alumnos” más cercanos, venían a saludarme. Subí la intensidad del sonido y me dejé llevar por la música.
Eran las siete de la tarde cuando terminé la primera clase, estábamos haciendo ejercicios de elongación, cuando miré hacia la puerta. Miguel. Por un momento, perdí la concentración de lo que hacía, al ver lo emocionado que estaba, cado dos segundos me levantaba el pulgar, mostrando su aprobación por las posiciones que hacía adoptar a las chicas. Cuando las hice llevar sus manos a la punta del pie, lo miré, se mordía el labio inferior y entrecerraba los ojos. No aguante. Empecé a reír a carcajadas. Me apretaba el abdomen – Payaso – pensé.
Debido a mi frustrado intento de concentración di por finalizada la primera clase, muchas de los chicos se quedaban para repetir la clase de las veinte horas, otras tantas se retornaban a sus casas, me despedí de todos. Iba en busca de Brawny cuando Cecilia se me acercó.
- ¡Ceci! – La saludé – te abrazaría, pero estoy hecho sopa – mientras miraba mi ropa empapada de sudor.
- Fabito, ¿cómo estás?, gracias por la clase, estuvo excelente… como siempre – agregó.
- Soy el mejor, lo sé – le dije ...