Yo no quería ser "putita"
Fecha: 13/05/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: Vanessa0022, Fuente: SexoSinTabues
Siempre fui una niña muy tímida y seria; no antisocial, simplemente selectiva. Desde que mis padres se separaron cuando yo tenía cinco años, mi madre, mis hermanos y yo nos mudábamos seguido. Estuve en muchas escuelas. Mis hermanos no batallaban en hacer amigos, pero a mí siempre me ha costado. A los diez años completé todo un año escolar en el mismo lugar, algo nuevo para mí. Ya tenía buenos amigos, y me gustaba mucho esa zona de la ciudad, muy tranquila. Pero ese verano llegaron cambios. Dos meses después de cumplir los once años (soy de mayo), a mi madre le ofrecieron un trabajo en EEUU. Yo no quería irme, pues ya estaba ambientada a la ciudad, a la escuela, a los compañeros; tenía excelentes calificaciones, siempre quedaba en primeros lugares en competencias académicas, y era portera en el equipo de fútbol de la escuela. Después de mucho discutirlo, se acordó que me quedaría en casa de mis tíos, el hermano mayor de mi madre y su esposa. Ambos tenían hijos de sus matrimonios anteriores, pero únicamente los dos hijos biológicos de mi tía vivían con ellos, (de 5 y 7 años). El plan inicial era que yo solo estaría con ellos un año, y terminando la primaria, me uniría con mi madre y mis hermanos. En agosto empezaron las clases. En septiembre me llegó mi primera regla. Mi tía se espantó demasiado; dijo que no era normal, que a ella le llegó hasta los diecisiete y a su hermana a los dieciséis. Puso el grito en el cielo, aseguraba que yo “ya andaba de puta” y me llevó al médico ...
... para que me revisaran. El médico le aseguro que yo aún era “señorita” y que estaba saludable; no había nada de que preocuparse. Pero desde que eso pasó, ella no me trataba igual. Si iba al parque o una fiesta con los niños, ya no me invitaba, y eran más las tareas domésticas que tenía que hacer. Lo único que ella hacía en la casa era la comida. Yo lavaba hasta la ropa de todos. Ella trabajaba de noche en un hospital y durante el día dormía, entonces yo entendí que era mi deber ayudarle. Transcurrió el año escolar con normalidad, pero al terminar la primaria tuve un promedio excelente, el mejor de mi generación. Me ofrecieron una beca completa para una secundaria muy avanzada a donde iba puro “cerebrito”. Dos de mis amigos irían también. Mis tíos hablaron con mi madre, diciéndole que yo no era malcriada y que no les causaba problemas, que no había problema si me quedaba para ir a una escuela que me causaba ilusión y que yo me había ganado. Aparte, económicamente no era un peso; todo lo contrario. Mi madre mandaba dinero cada quincena, más de lo que yo podría necesitar. Así fue como me quedé unos años más en casa de mis tíos, y comencé a descubrir mi sexualidad guiada por mi tío. ------ En realidad, todo comenzó poco antes de cumplir catorce años. Notaba que mi tío me miraba diferente, más detalladamente, y se acercaba mucho a mí. Siempre fue un tío cariñoso cuando yo era pequeña, pero desde que se volvió a casar había dejado de serlo. Y ahora intentaba serlo nuevamente, pero ...