Más allá de una fantasía con mi madre (Cap. 12 - Final)
Fecha: 23/05/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: andrewotero, Fuente: CuentoRelatos
... al filo del escritorio, al encontrarse nuestros miembros, casi de forma instintiva y como que tuvieran pensamientos y movimientos propios, empezaron a juntarse, nuestra calentura era tanta, que Sofía estaba ya cerca del climax al igual que yo, con mis manos la sujeté de las caderas y la apegaba lo más que podía hacia mí, mientras mi miembro entraba de una vez en ella, pude sentir como nuestras pelvis chocaban, y empezamos una serie de entradas y salidas que terminaron en uno de los orgasmos más deliciosos del mundo.
Así pasaban nuestros días, eramos complices y amantes. En ocasiones no podíamos controlar nuestros impulsos y a veces hacíamos cosas en lugares que no debíamos hacerlo, como aquella vez que la saqué del trabajo a medio día para ir a comprar un auto, con mi nuevo sueldo, pues era un gusto que ya nos merecíamos.
Juntos fuimos al concesionario y escogimos el color del vehículo que más nos gustaba a los dos, yo quería uno de tipo deportivo, pero ella insistía en una camioneta mas grande, mas familiar.
Encontramos un modelo que tenía un poco de las dos cosas, hicimos el papeleo y nos lo entregaron enseguida.
Dejé que Sofía manejara el auto, ella muy feliz lo conducía por las calles de la ciudad, por las que dabamos vueltas como luciendo nuestro juguete nuevo, y sacando pecho por ello.
Igual hibamos felices escuchando lo bien que sonaba el equipo del nuevo auto, así como comprobaba que ella no había perdido su pericia al volante, yo veía como su falda que ...
... depor sí era sobre la rodilla, al estar en esa posición, se le subía mucho más, dejándome ver sus apetitosos muslos, y me percaté que por motivos de alcanzar los pedales del embraje y acelerador a la vez, tenía las piernas un tanto abiertas, lo cual me excitó mucho.
Yo sin reparo, puse mi mano izquierda sobre su rodilla derecha, a lo que Sofía regresó a ver lo que estaba haciendo sin perder la vista en el camino, al ver que le gustaba, subí un poco más la mano, sentí un estremecimiento que le recorría por la pierna, entonces decidí subir mucho más hasta donde su falda me dejaba, y me puse a cariciar la parte interna de su muslo.
Este fue el detonante de una acción que realizaría Sofía, en la primera oportunidad que tuvo, giró el volante y nos llevó a un lugar apartado de las miradas curiosas, por debajo de un puente.
Ni bien detuvo el auto, se soltó el cinturón de seguridad, mientras yo hacía lo mismo y se subío encima mío, por suerte el auto que habíamos comprado era lo suficientemente amplio para permitir esta maniobra.
Ya subida encima mío, me besaba apasionadamente, yo hacía lo mismo mientras trataba de safar su blusa, ella mismo se subió la falda por sobre sus caderas. Entre los movimientos que teníamos me safaba mi camisa y aflojaba mi pantalón hasta dejar al aire mi miembro, que desde hace rato quería respirar con libertad.
Yo en mi deseperación, arranqué esas medias nylon que llevaba y lo mismo hice con sus interiores, ya libres los dos de ataduras, se ...