1. Trío con una joven y una madura


    Fecha: 11/10/2021, Categorías: Hetero Autor: pablo95, Fuente: CuentoRelatos

    ... prefiere rubias: es algo que para mí es tan importante o más que el físico. Si tengo que elegir entre un pibón de 30 y una joven del montón de 18, prefiero la de 18.
    
    El piso de citas estaba vigilado por una señora de unos 40 años que iba a comisión con las chicas (me lo contó la de 22, en una de nuestras charlas).
    
    Al entrar a la habitación, pagabas a la señora, y a continuación se metía la chica contigo. El caso es que un día se me ocurrió probar algo que a mí me ponía muchísimo, y aunque no sabía si lo podría llevar a cabo lo intenté. Acudí al piso, pagué a la señora, pero ésta me tendría que devolver el cambio. Para ello se fue a por el dinero. Antes de que volviera me dio tiempo a desnudarme completamente. Primero tendría que venir la mujer con la vuelta para luego entrar la chica. La mujer abrió la puerta y entró con el cambio. Se puso un poco nerviosa al verme completamente desnudo, se le iba la vista a mi polla, pero obviaba la situación.
    
    Antes de que se fuese la pregunté qué la parecería si se quedase en la habitación mientras me follo a la chica. Sólo a mirar (ya he dicho al principio que eso es algo que me da mucho morbo). La señora en ese momento ya miró a mi polla y medio riéndose me advirtió que a cambio tendría que pagarla a ella como otro servicio. Acepté sin pensármelo. Se rio de nuevo. Llamó a la chica voceando que estaba en otra habitación y acudió. La chica se asustó por la situación: no era normal que un cliente estuviera así en la habitación ...
    ... con la dueña. Enseguida le explicamos lo que quería hacer y un poco desconcertada prosiguió con su tarea sin mayor problema.
    
    Nos tumbamos en la cama y empezó a chupármela. La señora al lado mirando, se mordía el labio mientras observaba la escena como tratando de excitarme más. Había entendido cuál era su papel y lo que me gustaba.
    
    Cambiamos de postura y yo me puse de rodillas en la cama para que la chica me la mamase estando a lo perrito, en ese momento disimuladamente me coloqué próximo a la señora que estaba de pie en la lado de la cama observando. Yo le daba con mi polla a la chica en la cara haciendo pequeños descansos sacándosela de la boca durante la mamada. La mujer dirigía la mirada a mi polla.
    
    Continuando con mi juego morboso la dije a la chica que se retirara un poco y apuntando con mi rabo a la señora con una erección descomunal le pregunté que si le gustaba lo que veía, asintió.
    
    Le pedí entonces que me la tocase para ver lo dura que estaba y me la agarró con una mano. Ya estaba empezando a conseguir lo que quería. Siguiendo con su papel, exclamaba lo grande que era y lo dura que estaba y empezaba a jugar con ella subiendo y bajando.
    
    La joven miraba. Intentando aumentar el nivel de morbo, que era lo que estaba tratando de hacer, se me ocurrió comentar que por qué no le enseñaba cómo se come en condiciones una polla. Ella ya sabía lo que quería y comenzó a mamármela. La chica no sabiendo muy bien qué hacer le propuse que nos tumbáramos en la cama y ...