1. Por el culo a la Contadora


    Fecha: 10/11/2021, Categorías: Anal Autor: subtitulados, Fuente: CuentoRelatos

    ... a tal grado que comenzó a hacerme venir.
    
    L: ¡Dios, uhm!!
    
    S: ¡Si, dame tu leche, uhm!
    
    Sara se tragó mi semen, se embarro toda la cara y saboreó hasta la última gota de mi cálido esperma, después de eso acomodó su vagina en mi cara y me la dio a comer.
    
    Ella estaba sentada arriba de mi cara moviéndose en círculos mientras mi lengua entraba y salía de su húmeda vagina, sus gemidos me excitaban más, le acariciaba sus grandes nalgas y las apretaba para empujarla más a mi boca.
    
    S: ¡Si!! Que rico chupas papi, mas, cómeme, ¡uhm!!
    
    Mi lengua acariciaba mi clítoris, con mis dientes le daba pequeñas mordías, mis dedos empezaron a hacer acto de presencia dentro de su vagina que ya escurría un delicioso jugo sabor salado que era una vitamina para mí.
    
    Sara continuaba cabalgándome la boca, se movía como si tuviera mi verga dentro de ella, ya yo me había tragado varios vellos púbicos, pero continuaba devorándola, fue entonces que la deliciosa madura empezó a correrse en mi boca con un squirt que casi me ahoga.
    
    S: ¡Ah!!! ¡Uhm, si!!
    
    L: ¡Sabes a gloria bebe!
    
    S: ¡Que rico, que rico, uhm!!!
    
    Gozo su orgasmo de forma tal que hasta temblaba y casi ni podía hablar, de todos modos, yo ya la tenía bien parada nuevamente y listo para penetrarla.
    
    Antes de entrar ella volvió a mi pene y lo chupo, lo succiono en repetidas ocasiones, incluso lamio y mordía mis bolas, para después acomodarse en la cama abierta de piernas para su macho.
    
    Subí a la cama y como ...
    ... serpiente escurridiza me cole entre sus piernas y empecé a metérsela despacio, estábamos tan húmedos que mi verga entro fácil, iniciamos con la pose de misionero, yo me movía rápido, con el mete y saca, una y otra vez, mientras Sara cerraba sus ojos por el placer, se mordía los labios y me arañaba la espalda.
    
    S: ¡Si!! ¡Ah, uhm, ah, uf!!
    
    L: ¡Dios, esta calientísima!!!
    
    S: ¡Luis, uhm, que rico, uhm!!
    
    L: ¡Me encantas nena que lastima que no te cumplan bien!
    
    S: No digas eso, ¡uhm!! ¡Mejor métela, uhm!!
    
    Me levanté de la cama y la puse en la orilla levantándole las piernas y empecé a embestirla, tomándola de su cadera la levante un poco y en estilo carretilla mi verga le entraba por completo, ella no hacía más que gemir y jadear al sentirme entrar una y otra vez.
    
    S: ¡Si, uhm, que rico me matas, ah, ah!!
    
    L: ¡Dios!! Que ricas nalgas, uhm, ¡aprietas fenomenal bebe!!
    
    Nos pusimos de pie y la cargue, ella se apoyó de la luna de su cama y yo la cargaba y la dejaba caer con velocidad y fuerza en mi verga, estaba súper excitado.
    
    L: ¡Ah!! Sara, que rico, uhm!!
    
    S: Esto es mejor que estar en la bodega, ¡uhm!!!
    
    Se puso en cuatro, sus nalgas se veían fenomenales sin contar lo rico que se deslizaban nuestros fluidos por sus muslos, ella se empino y se abrió las nalgas, me pido la ensartara rápido, que ya la necesitaba, ¡que puta! Pensé antes de tomarla por su cadera y penetrarla de un solo golpe.
    
    L: Que rico, uhm, ¡mi amor ah!!
    
    S: ¡Sí! ¡Qué rico, cógeme, uhm, ...