La vida de Sandra (Cap. 6) - Relatos Eróticos

La vida de Sandra (Cap. 6)

... tres taradas en el suelo la situación cambió por completo, Sandra hizo uso de la palabra y con un tono imponente dijo:

Vamos a ver perras si vuelven siquiera a respirar sobre mi cuello les va a ir peor que ahorita, de atreverse a pronunciar siquiera mi nombre les daré tal golpiza que terminaran hospitalizadas con varios huesos fracturados. La Sandra que conocieron hasta hace unos meses ha muerto y ha renacido más que decidida a ya no permitirse ser abusada de nadie y mucho menos por unas putas mosquitas muertas como lo son ustedes, las cosas han cambiado y la que manda ahora soy yo y ustedes serán mis esclavas si es que desean sus huesos sin fractura alguna, ¿les ha quedado bastante claro o necesito repasarles la lección?

Las tres agresoras no supieron que hacer ya que en cosa de algunos minutos les había dejado sangrantes a todas y la nariz rota, Sandra con voz de mando dijo “veo que han quedado con dudas así que tendré que repasarle las nuevas reglas del juego”. Ahora las tres cobardes respondieron no por favor ya entendimos y haremos todo lo que tú dispongas a partir de este momento.

Una vez que Sandra tuvo controlada la situación les dijo ordenó ponerse de rodillas para suplicarle perdón por todo el tiempo que ella había estado padeciendo sus insultos y soportando sus agresiones. Sus nuevo trio de esclavas al no desear otra golpiza como la que recibieron momentos atrás se le arrodillaron a suplicarle les perdonara todo mal que le causaron anteriormente. Una vez ...

... teniéndolas a sus pies les ordeno inclinarse a besarle los pies y que no se detuvieran hasta recibir la orden de ponerse de pie.

Mientras que ahora Sandra estaba siendo adorada les dijo a su nuevo sequito “desde este instante se van a referir a mi como su Ama o su Diosa” ¿les ha quedado claro esclavas? Las tres cobardes ahora besándole los pies solo respondieron “Si mi Diosa como usted ordene”. Sandra ordenó ponerse de pie para así cargarle sus útiles y seguirla cinco pasos detrás de ella en silencio hasta llegar al salón de clase, las nuevas esclavas no tuvieron otra opción más que acatar y obedecer la orden recibida directamente de su nueva Dueña.

Casualmente la tutora de Sandra del año anterior fue testigo presencial desde lo lejos y vio lo ocurrido entre las agresoras de Sandra y su antigua alumna quedando totalmente sorprendida de como su antigua alumna se había transformado en una chica que sabía ahora afrontarse a cualquiera que deseara hacerle daño. A la hora de la salida buscó a Sandra para comentarle que había visto desde lejos como se había enfrentado a esas tres chicas sin dudar siquiera en darse a respetar y que sinceramente le felicitaba, Sandra respondió “gracias maestra, la verdad la Sandra que usted conocía hace unos meses ha muerto y decidí que no volverá a abusar nadie de mi de ninguna manera” la tutora sorprendida le reitero su felicitación por haber superado ese miedo y después se retiró. Terminada la plática con su antigua maestra Sandra chaqueo los ...