Aventuras en playa del Carmen (3): Porno venganza
Fecha: 27/11/2021,
Categorías:
Infidelidad
Autor: LennyPrat, Fuente: CuentoRelatos
El hombre que estaba en la piscina con Katherin salió y no pude evitar verle la herramientota que tenía, típica de un sujeto de color como él. Se vistió, agarró sus cosas y se retiró.
Mientras tanto, Sergio con dificultad se acercó a Katherin, ambos intercambiaron algunas palabras y se dirigieron a su recámara. Minutos después, Katherin salió vestida con minifalda y un top, se despidió de nosotros, se encontró afuera de la casa con el hombre que estaba con ella momentos antes y se marcharon.
Valentín y Raúl quisieron ir a ver a Sergio, pero los convencí de que él debía estar solo, así que me encargaron la casa y volvieron a la playa con los demás.
¿Me sentía mal en ese momento por Sergio? Obviamente, es más, me sentía empática, pues la engañó la misma tipa con la que me engañó uno de mis novios de la preparatoria. Sin embargo, también tenía intenciones perversas, así que agarré un par de cervezas y fui a la habitación donde se encontraba Sergio, quien estaba acostado en la cama y me senté en el filo de la cama. La plática no se hizo esperar mucho.
—Contéstame las siguientes preguntas —decía como nervioso—: ¿Quién tenía la razón en la discusión de ayer, Lizeth o Erick?
—Por supuesto que Lizeth —contesté.
—¿Y quién ganó? ¿O quién obtuvo lo que quería?
—Pues si Erick quería que su infidelidad no afectara en su relación, la que ganó fue Lizeth.
—Ok. Ahora, entre Katherin y yo, ¿quién tiene la razón?
—Tú, sin duda.
—Y adivina quién ganó —dijo ...
... con el nudo en la garganta.
—¿Sabías que uno de mis novios me puso el cuerno con ella?
—De haberlo sabido.
—No te conocía bien.
—No importa, me pude haber dado cuenta desde hace tiempo, pero no quise. Confiaba ciegamente en ella. Ahora entiendo todo a la perfección, entiendo porqué ya no quería estar en la intimidad conmigo desde hace unas semanas, ella ya tenía premeditado esto. Me siento humillado.
—No tienes porqué —dije tomándolo de la barbilla y levantando su cara—, ella no vale que estés así, ahora que te hizo esto y que tienes mi referencia acerca de cómo es.
—Lo sé, pero en este momento duele. ¿Cómo le está haciendo ella para que no le duela haberme engañado?
—No mires a Katherin, es una cínica hija de puta. Mira a Lizeth, hoy está como si nada, pero tomando su distancia del imbécil de Erick. Solo no está permitiendo que la situación le afecte mientras disfruta sus vacaciones.
—Además me vino a joder la existencia la lesión de tobillo que tengo.
—Tú diviértete, en la medida de lo posible. En este momento le deseo a Lizeth que se encuentre a un joven atractivo, que se gusten y se vayan juntos a hacer cochinadas —dije sin evitar pensar en Tiago y lamentando que no le pedí su teléfono u otra forma de contactarlo.
—Eso me hace falta. Por cierto, discúlpame de nuevo porque me hayas visto masturbándome ayer.
—Descuida. ¿Sabes algo? En cuanto saliste de mi recámara, yo me encerré y me masturbé también.
—¿También andabas ganosa?
—Sí, ...