18 años recién cumplidos
Fecha: 08/12/2021,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Lara, Fuente: CuentoRelatos
... estaba tan cerca, mira ahora sí que estoy muy cerca. –Joan se había acercado tanto que su cuerpo casi rozaba el mío y me empezaba a poner un poco nerviosa.
-Yo no… esto que… -No sabía que decir en ese momento, le tenía casi rozándome, su torso desnudo a pesar de que me había dicho que se iba a cambiar, su bañador eso si uno nuevo, pero tan cerca de mí que me estaba rozando con algo duro que yo esperaba no fuera su pene.
- Lara, ¿no te importará que me acerque tanto a ti, verdad? – Me decía con una voz suave y calmada. - Te veo asustada y no tienes porque, no eres una chiquilla y que te has convertido en toda una mujer, ¿lo sabes verdad?, en una mujer muy hermosa, realmente bonita. –En esos momentos Joan apoyaba sus manos en la encimera de la cocina atrapándome en el centro de sus brazos y mirándome a los ojos muy fijamente.
-Yo… bueno… yo ya no soy esa chiquilla que conoció profe, pero no sé que… la verdad es que. –seguía sin articular dos palabras seguidas y cada vez más nerviosa al estar entre sus brazos y con su cuerpo tan cerca que sentía su pene sobre mi vulva.
-Profe, profe, no me llames así, llámame Joan. – Seguía hablándome casi en susurros, acariciando con ternura uno de mis brazos de arriba abajo con su mano. - Dime Lara que dirías si te besara ahora. –Joan dejaba suavemente sus manos en mis caderas. –Que dirías si luego te doy otro, dime Lara, ¿te gustaría?
-Yo, supongo que… creo que… ya es tarde y tengo que marcarme, podrías… -Por fin articulé más ...
... de dos palabras seguidas, estaba tremendamente nerviosa y a la vez muy excitada, quería marcharme, pero quería quedarme, en mi cabeza no paraba de repetirme que era muy viejo para mí, pero sin embargo era tan guapo, no paraba de decirme que me fuera, que me quedara, que le dijera que si, que le dijera que no.
-Entonces no quieres que te dé un beso Lara. –Preguntaba una vez más.
-No, si, no sé, yo no… no sé profe. –Continuamente me salía de dentro llamarle profe y otra vez ni dos palabras seguidas.
-No, si, si, no, mira vamos a hacer una cosa Lara, tú cierra los ojos, así, ciérralos y tranquila que no como, cierra los ojos Lara. –Me hablaba con una voz muy suave, dulce y calmada a la vez y yo cerraba los ojos como me había dicho, en ese momento note como sus manos apretaban mis caderas y como su pene se frotaba con mi vulva, sentí sus labios cálidos sobre los míos, un beso dulce y solitario, húmedo pero apasionado. –Ves no era para tanto, no crees Lara.
-No la verdad que no. –Le contestaba abriendo los ojos y mirándole tan cerca que sus labios todavía tocaban los míos.
-Ves como no me como a nadie, ahora si tú quieres te vuelvo a besar y si no, pues… te llevo a casa o donde tú quieras, aunque yo preferiría que te quedaras aquí, conmigo. –Joan había empezado a subir con sus manos por mi cuerpo desnudo salvo por el bikini y el pareo que llevaba en esos momentos, sus manos subían lentamente hasta llegar a mis senos, sujetándolos con sus manos, llenado sus manos con ...