Las clases con el nuevo profesor
Fecha: 11/12/2021,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Dulce Adicción, Fuente: CuentoRelatos
Todo empezó en el comienzo de cursada del primer cuatrimestre. Rocío se dedicaba a continuar su secundario. Todo empezó normal, compañeros de diferentes edades, profesores de edad regular, todo común.
Las clases empezaron con Informática, la hora siguiente era de Lengua y Literatura. El primer mes lo comenzó una profesora que por motivos personales dejó de dictar clases. Luego de varios días sin profesor, llegó Sebastián. Joven, buen mozo y soltero.
Rocío se sentaba en la tercera fila en el segundo banco, tenía la vista justa en dirección al profesor. Miradas iban y venían constantemente.
Rocío, de 26 años medía 1,67, curvas marcadas, y un poco de panza que para nada le molestaba, más bien sabía disfrutarla con cualquiera con el que estuviera, pelo castaño, unos 95 de tetas que no tenía nada que envidiarle a nadie y un culo que más de uno disfrutó de darle unas buenas nalgadas.
Sebastián rondaba los 38 años, medía no más que Rocío, flaco, con unos ojos marrones que cautivaban a cualquiera, y una verga que se llevaba más de un suspiro cuando la veían.
Un día el profesor pidió le recordaran el llevar un libro, fue una buena oportunidad para Rocío de entablar una conversación con él fuera de clases. El mensaje llegó, y el con un corto “gracias” respondió. Rocío notó que tal vez no era lo que imaginaba.
Pasaron los días y Sebastián se encargaba de avisarle a ella por medio de un mensaje todas las cosas relacionadas con la clase, le pedía a Rocío que se ...
... encargue de todos los asuntos que requerían ayuda. Ya sea el sacar fotocopias, avisar al resto si él faltaba. Y cuando ella participaba en clases, el resaltaba sus logros más que al resto.
Cuando Rocío le conto a sus amigas, estas le dieron a entender que era obvio que algo más pasaba. Ella empezó a arreglarse, maquillarse y cada que podía le mandaba un mensaje a Sebastián con cualquier recordatorio tonto sólo para tener una excusa para hablarle.
Un día casi finalizando la cursada, y el favor del profesor para con los alumnos dando permiso de estudiar para otras materias en su hora, notó a Rocío fuera de su clase, junto con otros compañeros, estudiando algo nerviosos.
Sebastián salió para el baño, en ese mismo momento Rocío recibió un mensaje con una sola palabra, “SEGUIME”. Disimuló como pudo y dejando el papel que estudiaba en el banco, fue en dirección de él.
Llegó a uno de los baños clausurados y él la esperaba en la puerta, sin decir nada se metió y Rocío con los nervios normales fue detrás de él. Volvió a cerrar la puerta, el baño no era grande ya que era para que sólo una persona se metiera dentro.
Rocío lo miro, y siendo obvia su pregunta pero queriendo disimular, le preguntó porque estaban ahí.
- Creo que ambos sabemos lo que pasa, ¿O me equivoco, Rocío? -Dijo y ella un tanto anonadada lo miró.
- Si, pero creo que acá no puede pasar nada, podría entrar alguien profe, sabe que es arriesgado.
- Tuteame, Rocío. No me trates más de usted. -Exclamó ...