Suma y sigue...
Fecha: 19/12/2021,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... Le hizo una trenza delicadamente mientras que acercándose a su oreja derecha y le susurró:
- No por mucho tiempo… -
Le mordió el lóbulo de oreja y continuó haciendo la trenza, al terminar empujó a Silvia suavemente contra la cama haciendo que cayera boca abajo, se separó y comenzó a quitarse la americana y el chaleco, sin dejar de mirar a Silvia se quitó la corbata y la dejó en la mesilla. Silvia estaba muy excitada contemplando como su profesor se desnudaba frente a ella, aunque tímidamente se tapaba las tetas.
- No quiero que te tapes, eres preciosa, y eres mía ¿de acuerdo? – Dijo el profesor.
- S... Sí… - Susurró ella mientras quitaba las manos de sus tetas.
- A partir de ahora me llamarás amo y me deberás sumisión, si te portas bien es posible que sea benévolo contigo – Ordenó el profesor completamente serio
-Vale… Vale amo - Respondió ella obedientemente.
- Así me gusta – Dijo caminando hacía la cómoda que tenía al lado de la cama, abriéndola bajo la expectante mirada de Silvia, cogió varios objetos y se dirigió hacia ella.
- Quiero explorar tus límites – Le dijo.
La colocó bruscamente a cuatro patas y cogió unos grilletes, colocó en él una de las manos de la chica, pasando después la cadena alrededor del cabecero de la cama y colocando la otra mano en el grillete restante. Después cogió un antifaz y se lo puso a Silvia privándola de la visión, volvió hacia la cómoda y sacó una fusta de cuero y tras mirarla unos segundos volvió hacia la cama ...
... en la que estaba ella a cuatro patas con su culo a merced del profesor.
Alzó la fusta y le dió un fuerte golpe en la nalga derecha, tras lo cual ella pegó un grito y se inclinó hacia adelante.
- ¿Te gusta perra? – Preguntó el profesor.
- Mucho, amo – Respondió mientras se recuperaba del golpe.
- Así me gusta, eres una perra sumisa, mi perra – Sonrió.
Alzó la fusta y una vez más golpeó a Silvia, aunque aumentó ligeramente la fuerza provocando un grito mayor en la chica, que comenzó a gemir aumentando la respiración. Mikel pudo comprobar como el coño de su alumna comenzaba a lubricar. Alzó de nuevo la fusta y golpeó su culo con todas sus fuerzas, a lo que ella respondió con un tercer grito.
- Has conseguido excitarme perra – Dijo mientras se acercaba a ella que continuaba con el antifaz.
Sin que ella lo notase se acercó a su culo en cuatro patas y metió la lengua en su húmedo coño haciendo que Silvia se estremeciera y comenzase a gemir cada vez más. El profesor sacó su lengua y le soltó un tremendo azote en la nalga, haciendo que Silvia cayese hacia adelante.
- No quiero que hagas ruido, mis perras no hacen ruido – dijo volviendo a colocarla a cuatro patas.
Cogió la corbata que tenía en la mesilla y la pasó alrededor del cuello de Silvia que aún se recuperaba del azote.
- Voy a follarte y cada vez que gimas te castigaré ¿lo has entendido? – preguntó.
-Sí… - respondió entrecortadamente.
- Sí ¿qué? Perra – insistió Mikel.
- Sí amo – dijo ...