Marcos White y yo - Relatos Eróticos

Marcos White y yo

... genial pero yo no me esperaba que a las 12:30 a Marcos y a mí nos prepararon una fiesta sorpresa.

Lo celebramos en una sala de fiestas que hay dentro del bar y por eso estaba todo tapado, mi amiga abril me regaló un collar muy chulo, unos peluches un libro de aventuras y un viaje con ella a Nueva York.

Y como fue una noche genial Marcos y yo no pudimos dormir entonces estuvimos toda la noche hablando y riendo fue súper divertido. Los monitores nos despertaron y yo estaba muy nerviosa porque era mi cumpleaños y el de Marcos White, toda la cabaña nos despertamos y como sabían que era nuestro cumpleaños nos felicitaron y después de eso nos vestimos, fuimos a desayunar y después de una hora fuimos a un pueblo pequeño llamado Tossa de Mar.

Visitamos todo el pueblo era precioso nos compramos ropa, artículos, comida y nos fuimos a la playa ya eran las 2 de la tarde y nos fuimos al campamento a comer.

Después de comer unos amigos y yo nos fuimos a mí cabaña para jugar al trivial cuando pasó un rato nos fuimos a jugar al ping pon, ya era la hora de hacer más actividades y nos fuimos a un campo de fútbol hicimos béisbol, voleibol y unos juegos ingleses muy famosos.

Ese día fue magnífico porque me lo pasé genial con mis amigos y con Marcos White eso nos llevó toda la tarde y nos fuimos a las 8 al campamento para cenar luego a las 10 unos amigos y yo nos fuimos a un bar a jugar al billar después de un rato como nos aburríamos fuimos a la discoteca estuvimos bailando ...

... mucho y nos lo pasamos genial pero yo no me esperaba que a las 12:30 a Marcos y a mí nos prepararon una fiesta sorpresa.

Lo celebramos en una sala de fiestas que hay dentro del bar y por eso estaba todo tapado, mi amiga abril me regaló un collar muy chulo, unos peluches un libro de aventuras y un viaje con ella a Nueva York.

Y como fue una noche genial Marcos y yo no pudimos dormir entonces estuvimos toda la noche hablando y riendo fue súper divertido.

6: Sentimientos

Era el tercer día estaba un poco cansada ya de levantarme todos los días a la misma hora, pero lo que me hacía levantarme cada mañana era tener a Marcos a mi lado.

Nos volvimos a ir a la playa y ese día hicimos surf y el agua estaba como un cubito de hielo pero me lo pasé genial aunque me caí y me hundiera una ola.

A mí ya me gustaba Marcos pero desde que vino me gustó más y yo creo que él también le gusto pero yo no quise decir nada, llegamos cansados de la playa yo ni comí y me fui a mí cabaña y Marcos tampoco comió y se vino a la cabaña conmigo, nos sentamos en mi cama y empezamos a hablar, me contaba en todos sitios que ha estado y yo alucinaba me caía súper bien, pero notaba que estaba un poco raro conmigo porque yo pienso que también se está enamorando de mí.

Por la tarde me encontraba fatal y no puedes ir a ningún sitio y Marcos se quedó conmigo y eso me hizo sospechar un poco porque si no estuviera enamorado de mí se quedaría.

Pero me dije a mi misma que eso era imposible y lo deje ...