Marcos White y yo - Relatos Eróticos

Marcos White y yo

... pasar y como no podía ir a ningún sitio Marcos y yo echamos una partida al trivial.

Él se quedó dormido y yo me empecé a masturbar porque me ponía mucho y cada vez que lo veía me mojaba más todavía.

Cuándo se despertó jugamos a las cartas, pero me ponía muy caliente y no podía aguantar me tenía que ir al baño a mojarme la cara y a decirme a mí misma que me calmase.

Me notaba un poco rara y él me preguntaba porque y yo le decía que era por fiebre y encontraba mal pero él no se lo creyó.

Entonces él me dijo que teníamos que hablar muy seriamente, y me dijo que le gustaba mucho yo me puse muy roja y también me dijo que la polla se le ponía muy dura cuando me veía, y noté que se estaba poniendo tiesa otra vez, y me puse súper cachonda. De repente se echó sobre mí y me empezó a dar besos por el cuello, luego bajó hasta mis senos se en empezaron a poner duros y solté algunos gemidos luego bajó a mi clítoris solté más gemidos, metió su lengua en mí coño y sus dedos también me corrí en su boca fue excitante y aun así seguimos, el metió su polla en mi boca y luego la metió en mí, dolía un poco pero merecía la pena por el orgasmo era súper excitante y nos corrimos a la vez al final me sentí genial.

Nos quedamos dormidos abrazados y cuando nos despertamos me dijo que actuásemos con normalidad, como si no hubiéramos hablado de este tema y no hubiéramos follado.

7: Mas sexo

Eran las cuatro de la madrugada yo no podía dormir porque no paraba de pensar en Marcos, cada ...

... vez que pensaba en el me mojaba mucho y me ponía súper caliente y al final me tenía que masturbar.

De repente se abrió la puerta, yo me hice la dormida. Pero la persona que entro me toco el brazo y yo me asuste, pero resulta que era él.

Me levante y me vestí por que llevaba el pijama, salimos y nos fuimos a dar una vuelta por el campamento.

Yo le pregunte que porque estaba despierto él me dijo que era porque no podía de dejar de pensar en mí, y también me dijo qué se hizo varías pajas , y yo le dije que tampoco podía dejar de pensar en él, entonces nos pusimos calientes.

Nos fuimos a una cabaña libre, en cuanto llegamos le empecé a desabrochar la camisa después me obligo a quitarle los pantalones y a chuparle la polla se la chupe y se corrió en mi boca eso me excitaba mucho y de repente me dijo que parara y yo le pregunte por que, sin decir nada se abalanzó a mi cuello me empezó a darme besos eso se convirtió en chupetones, pero luego bajo hasta mi clítoris me lo chupo, metió sus dedos y luego su anaconda, que por cierto era enorme.

La metía y la sacaba con fuerza, luego me la metía súper fuerte y soltaba gemidos y de vez en cuando decía: oh si marcos más fuerte y más rápido. Me puso a cuatro patas y me la metió por el ano él se corrió dentro de mí y yo a los dos minutos yo también me corrí.

Terminamos, nos vestimos y nos fuimos a nuestras cabañas y hasta el día siguiente no hablamos. Y de lo que hablamos no fue exactamente de lo que pasó la noche anterior me ...