Con mi tío por años 2
Fecha: 02/06/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: olimpo, Fuente: SexoSinTabues
... embestía apretaba sus nalgas. Aunque no me la estaba metiendo, lo que estaba haciendo Claudio me excitaba mil veces más que las veces que mis vecinos me habían penetrado. El hombre sabía lo que hacía, se notaba la experiencia en sus movimientos y eso me ponía a mil, y a él igual. Nadie decía una palabra, por 15 minutos sólo suspirábamos y gemíamos con pasión, mientras nos tocábamos y Claudio seguía con las embestidas. En un momento, Claudio rompe el silencio y dice: C: (mirándome a los ojos, con su mano derecha en mi cintura y la izquierda en mi mejilla) Ayy Ricky qué rico esto, me encanta, estoy a punto de acabar. Qué malo que seas tan chico, sino te la metería y acabaría adentro tuyo. Pero ya crecerás y ahí te haré mío, completamente. Yo quería gritarle que me lo metiera, que ya no era virgen por atrás, pero igual me daba un poco de miedo por el porte de su pene y entendía lo que Claudio me decía. Sin embargo, cuando dijo que cuando creciera me haría suyo, me sonreí y dije: R: (suspirando y gimiendo de placer, mientras seguía recibiendo sus embestidas y apretaba sus glúteos) ¿Eso quiere decir que lo seguiremos haciendo? Porque si es así, sería genial, esto es lo más rico que me ha pasado en la vida, y ahora sólo quiero crecer para ser tuyo Clau, sólo tuyo. C: (mirando muy caliente) Obvio que seguiremos, si ambos queremos. Eso sí, es nuestro secreto, no se lo cuentes a nadie, o si no tendremos que dejar de hacerlo (él seguía gimiendo y más excitado aún). Luego de decir eso, ...
... Claudio aceleró la velocidad de sus embestidas. Se movía más rápido y se puso como un toro, me acariciaba fuerte, me tomaba con sus manos de hombre por todas partes y eso me calentaba aún más. Sus embestidas se hacían más y más rápidas, y sus suspiros pasaban a ser gemidos más fuertes. Mis gemidos igual aumentaron de volumen y con los movimientos de Claudio y la fricción de mi pene en su pelvis (como si me estuviera masturbando) comencé a sentir que acaba. Estaba cada vez más cerca del orgasmo y sentía que llegaba al cielo. Mientras más fuertes eran las embestidas de Claudio más me acercaba al final. El momento llegó, acabé y mandé dos gritos fuertes que obligaron a Claudio a taparme la boca. Sentí como 5 chorros salieron de mi pene empapando mi abdomen y el de mi tío Claudio. Nunca me había salido tanta leche, ni con las mejores pajas que me hacía mientras alguno de mis dos vecinos me lo metía. También sentía que mi leche era más espesa que antes, con mi tío me salía por primera vez semen de hombre. Cuando Claudio sintió que yo había acabo, se sonrió y aceleró más el ritmo de sus movimientos. Por más de un minuto, me embistió a toda velocidad, sin parar. Yo estaba tirado debajo de él, como muerto por haber acabo recién. De pronto, Claudio comienza a bajar la velocidad y a tirar gritos ahogados, pero que demostraban una calentura a mil. Entre mis piernas sentía cómo se endurecía su pene y los 4 o 5 chorros de leche que sentí se escurrieron sobre la cama hasta la parte baja de ...