1. Un orgasmo diferente


    Fecha: 13/03/2022, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... piernas empezaban a temblar, sentía cosquillas en todo mi cuerpo, no entendía que estaba pasando ¿Estoy excitándome? Pero ¿Por qué? ¿Qué está pasando? Y por primera vez en un baile me acerque tanto como para tocarlo, pero él con un suave movimiento se levantó, apenas rozándome sin siquiera ponerme un dedo encima, solo con su mirada fija en mis ojos, se acercó a mi oído derecho y me murmuro: “Te desvestiría lentamente hasta penetrarte y desatar nuestras lujurias más profundas!”
    
    No sé cómo explicarlo, pero mi vagina se mojó como nunca, un escalofríos recorrió toda mi espalda hasta llegar a mi cuello y subir lento hasta mi cabeza. Él dio media vuelta y se marchó, dejando solo una servilleta en su mesa con su número de teléfono. Esa noche al llegar a mi departamento, busque mi vibrador fucsia con relieves y pequeñas protuberancias, me tendí en mi cama, comencé a desvestirme, a masajear mis pechos, a tocar mi vagina…jamás la había sentido tan mojada, tan caliente, palpitando fuertemente mientras recordaba a ese hombre susurrándome al oído, comencé a penetrarme con mi vibrador hasta llegar a lo más profundo de mi útero, mi vagina rebalsaba de gozo, de placer, mis jugos se derramaban por todos lados, me volvía extremadamente loca hasta que en mi último suspiro exclame con gran placer un grito de orgasmo agudo que me estremeció desde los pies hasta mi cabeza…había sido el orgasmo más intenso que tuve en mi vida, el más mojado y el más placentero.
    
    Al cabo de unos minutos ...
    ... mientras tocaba mis labios y jugaba con mi clítoris, intentando recuperar algo de la cordura que me quedaba, tratando de entender porque me sentía tan caliente…¿Sera que hace mucho no tenía sexo? No, eso no era ¿Sera las palabras que me dijo aquel hombre me encendieron a tal punto? No, sus palabras no eran…aun así una última duda surcaba mi mente…¿Habrá sido su presencia? No lo pude descubrir, sino hasta un mes después. Paseando por un parque muy cerca de mi departamento me topo con él nuevamente, mi respiración se agito al instante, no podía entender como pudo cruzarse en mi camino nuevamente, con una cálida sonrisa dijo hola y se presentó, le decían Eros, al igual que yo, tenía un sobrenombre.
    
    Comenzamos a hablar y las horas comenzaron a volar, momentos tras momentos días tras días, nos compenetrábamos tanto el uno con el otro que perdíamos a noción del mundo y del tiempo, hasta que un día nuestra tención no soporto más y nuestras ropas gritaron al ser rasgadas el uno del otro, sintiendo como nuestras manos recorrían nuestro cuerpos, explorándonos, sintiéndonos, él sub cavando en lo más sagrado y profundo de mi ser, yo recorriendo su largo y grosor, haciendo cada vez este mas deseosa de él y de sentirlo dentro de mí; me arrodille y comencé a darle sexo oral, era increíble!! Su sabor, su espesor, su hedor tan particular entre su piel y sus jugos, succionando su pene hasta lo profundo de mi garganta, sentía como el agarraba mi cabeza y me ayudaba llegar cada vez más a la base de ...