1. Mi sueño se ha hecho realidad


    Fecha: 25/03/2022, Categorías: Fetichismo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... parase.
    
    Paró y sacó su polla de mi culo, estaba reventada y se lo dije, y me respondió “te ha gustado zorra?” y le dije “demasiado.”
    
    Entonces nos besamos y nos acostamos una junto a la otra en la cama. Me miró y me dijo “que puta eres, me alucinas.”
    
    Y le respondí “gracias”. Entonces me quité el sujetador que aun llevaba puesto y empezó a tocarme mis tetas y a chuparme los pezones que se me pusieron duros instantáneamente. Entonces me miró mientras me los chupaba y me dijo “mmm, que duros están, me encanta”.
    
    Y entonces fue mi turno, ya casi no podía con mi cuerpo de las corridas que me había llevado con su follada, pero no iba a dejar que se librase de que yo la follase y se corriese igual.
    
    La cogí y la dí la vuelta, pasando a estar de encima de mí a estar yo encima, y ahí comenzó otra sesión de sexo, donde tras quitarle el arnés, le metí la polla por todas partes, hasta que se corrió ella otras dos veces, por supuesto mientras nos decíamos de todo y hacíamos de todo. La reventé el culo igual que ella a mi, y me dijo que el sexo anal la volvía loca y que quería que la reventase así siempre.
    
    Volvimos a quedar dos días después y ya me había comprado una peluca rubia, unos taconazos de aguja y un set de maquillaje completo.
    
    Me abrió la puerta de su casa como a mi me gusta, vestida de la puta que en el fondo es, y directamente tras morrearnos en la puerta me llevó al baño y me enseñó la peluca y los tacones y me dijo “prepárate zorra, desde esta noche vas a ...
    ... ser mi puta cada día. vístete y luego te maquillaré como una mujer para que me folles como la lesbiana que eres siempre que estemos juntas.”
    
    Desde entonces el sexo entre nosotros es brutal, casi hasta caer rendidas, sesiones maratonianas… Nos encanta hacer de todo y nos gusta insultarnos y decirnos toda clase de burradas, hace que nos ponga mucho más cachondas.
    
    Un día después de disfrutar juntas me dijo que porque no me iba a vivir con ella, que le encantaría tenerme de mujer las 24 horas con ella. La respuesta inmediata estaba clara, “si, desde luego, me vengo a vivir como mujer contigo, quiero ser tu novia, tu puta, tu zorra, quiero ser tuya y estar todo el día vestida de guarra para ti.”
    
    Evidentemente, tocó otra sesión interminable de sexo lésbico salvaje.
    
    Al día siguiente, hice la mudanza y me fui a su casa, donde ahora me paso el día vestida de mujer excepto cuando tengo que salir a hacer algo o salimos juntos a algo, ya que de momento, sólo sigo vistiéndome en la intimidad de nuestra casa. Pero es llegar a casa y vestirme. Dormimos en lencería o desnudas todos los días y he aprendido a maquillarme bien, aunque de vez en cuando es ella quien quiere maquillarme.
    
    Ya no hay un solo armario sexy, ya tenemos 3 y desde luego una casi infinita colección de juguetes sexuales de los que hacemos uso más que frecuentemente.
    
    Me paso el día vestida de puta, paseándome en lencería, completamente transformada en una mujer con mis pelucas y maquillada, y siempre subida a ...