Es rarísima: o no coge o no le es suficiente
Fecha: 28/03/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: AMANECER, Fuente: CuentoRelatos
... mí. Cada choque era un gemido. Zas, aggg, ahhh, zas. siii, zas "Como te mueves" , “ah, sí métemela” zaz.
Las tetas le bailaban y chocaban en su pecho: Zaz!!! Mis testículos sentían las grandes nalgas golpeándolos en casa embestida. Zaz!!! Mi verga estaba tiesa, ancha y venuda y sentía que se dilataba en casa ocasión que montaba a esta hermosa hembra que buscaba un macho. "Cógeme Papi, soy tuya", me dijo mirándome. “Soy tuya, soy para tí", me dijo bramando mientras restregaba las nalgas sobre mi verga y me provocaba un placer enorme." Méteme esa cosa, hazlo así", gritaba mientras una almohada me servía para ocultar sus gritos: “ayyy, siiiii, ahhh, ahhh” ¿Eso quieres?, De verdad eso quieres?" Le cuestioné ¡mientras me dejaba ir con todo sobre el culo que me ofrecía! Y es que el espectáculo era magnífico: si había aprendido a mover las nalgas en incontables noches de sexo, si había aprendido a comerse una verga, disfrutarla y exprimirla, ahora lo había como quizá no lo había hecho antes: su humedad no mentía. Se aplicaba. Se sabía una hembra dispuesta a todo. Se ponía a prueba. Era su naturaleza: el sexo era vital para ella. Si estaba conmigo, se debía a qué no la complacían. Pero la veía concentrada en una cosa: disfrutarme y enseñarme cómo le gustaba ser cogida, domada, poseída. “¿Quieres que te haga mía?", Le pregunté: "síi, afirmó con absoluta seguridad. Entonces ábrete esas nalgas y comencé a darle de nalgadas, con fuerza, hasta ponérselas rojas, muy rojas. Le ...
... encantó. Gimió y gritó. ¿Te gusta, mami?" Le pregunté. "Síi, Sii me encanta" dijo ella mientras movía las nalgas con fuerza y profundidad. Aullaba del placer que le causaba y me pedía que así siguiera
A: Me embestía con fuerza, como si quisiera atravesar mi cuerpo: ”Ahhh, mi hombre”, yo lo disfrutaba tanto. Gemía y gritaba, no lo podía contener, las almohadas no eran suficientes. “Awww, que rico me coges, papi. Tu verga es la más rica que me han metido... sigue, papi” Mis nalgas golpeaban con su pelvis, rebotaban en sus bolas, “awww“. El sonido me ponía más caliente. El gemía con cada grito y suspiro mío
- Te gusta? Así?? siiii, así!! “¿Te habían cogido así?” “sí, pero con nadie había tenido tantos orgasmos, awww sigue” Me la seguía metiendo, sentía gotas de sudor que caían en mi espalda y en mis nalgas. De repente me tomó del cabello, me jaló suavemente hacia él, mi espalda se arqueó más, era un movimiento nuevo, algo pasaba. No me molestó, al contrario, me excitó más, me sentía dominada. Me penetró aún más fuerte, sabía que algo venía. Me gustaba como me tomaba- “Papi, quiero ser tu mujer, tu puta, quiero que me cojas siempre” “Cuando quieras, mami. Cuando me lo pidas”
-Agrrr!!! Me voy a venir de nuevo!! –“vente, vente, “¿te gusta cómo te la meto?”
-“aww siiii, que rica verg…”
B-Le pregunté: quieres toda mi leche?
A-Aww siiii, todaaa
B- Quieres que te llene la panochita?
A- Llénamela de lechita, papi
B- Aprieta las nalgas!! Exprime la verga!
A: Awww ...