1. Sexo anal en el baño de un bar


    Fecha: 08/04/2022, Categorías: Anal Autor: carogonza80, Fuente: CuentoRelatos

    ... discretamente me paro a su lado, lo miro y me presento: “Soy Caro, vos?”. Bajó su mirada a mi escote, luego a mi cola y me dijo: “Pablo, muchísimo gusto” y sellamos el encuentro con un frío, pero pícaro beso en la mejilla.
    
    Antes de volver a mi lugar de trabajo le dije: “te gustaría conocerme mejor? te espero debajo del escenario”.
    
    Y lo espere ahí. Entre pilares de madera, que sostenían las tablas, una tela negra rodeaba la estructura y debajo las vibraciones de la música sonando le daban a la escena, que pronto viviríamos, un halo de aventura extra.
    
    El encuentro debía ser fugaz y la aventura me excitaba, el chico no tanto.
    
    Llegó en aproximadamente tres minutos, nervioso, temeroso de ser descubierto ahí debajo.
    
    Rodeó mi cintura con su brazo y me beso apasionadamente. Me besó muy bien, la experiencia que tenía con mujeres era muy amplia y sus besos daban cuenta de eso.
    
    Introduje mi lengua en su boca, mientras desabrochaba con rapidez su camisa. Recorriendo un camino con mi lengua sobre su pecho llegue hasta su pelvis, al momento me ponía de rodillas en el pasto, ocultos por el bullicio y la muchedumbre.
    
    Le practique sexo oral. Me puse nuevamente de pie y volvió a sujetarme por la cintura, giró mi cuerpo, colocando mis manos sobre una de las vigas de apoyo, con su dedo índice recorrió mi vagina, abrió mis piernas y al comprobar la humedad que salía de mi, me cogió, rápido, casi egoístamente.
    
    -no aguantaba más -me dijo- me calentas demasiado -mientras ...
    ... tomaba entre sus manos mi cara y me miraba con ojos grandes.
    
    Quedamos en vernos más tarde y continuar con lo que de mi parte había quedado pendiente.
    
    Y así fue, nos fuimos juntos del evento, hasta el departamento de soltero que sus padres le alquilaban. Nuestro segundo encuentro fue realmente malo. Mis amigas tenían razón, él era una persona egoísta que solo se interesaba por su placer, sin tener en cuenta el mío.
    
    Después de esa noche nos veíamos cada vez en más eventos, en los bares, en todos los lugares de moda del momento, pero no volvimos a tener sexo. No volvería a cometer el mismo error, pero si creía que merecía un escarmiento.
    
    Luego de unos meses me enteré que él trabajaba en el boliche de la costanera, una noche me presenté en la boletería. Al verme su expresión y su reacción inmediata fue una sonrisa de costado, que acostumbraba hacer como conquista.
    
    A mi me divertía mucho la actitud que tomaba Pablo cuando me veía y no podía tenerme.
    
    Comencé a usar todo mi encanto con él, le hablaba y miraba su boca, recorría mis labios con la punta de mi lengua, acomodaba mi minifalda y mi escote queriendo mostrar siempre un poco más.
    
    Al entregarme la entrada para ingresar, toma mi mano y la besa.
    
    Yo le digo a mi amiga que se adelante que yo entro enseguida e ingreso con él al lugar que oficiaba de boletería.
    
    El lugar era muy pequeño, con espacio solo para una persona, una silla y un perchero.
    
    Cuando abrió la puerta me abalancé sobre él, tomo su cabeza ...