Infiel por primera vez en una comida
Fecha: 21/04/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... ooooo
En el momento en que mi falo empezó a resbalar hacia las profundidades de aquel, hasta ese momento estrecho hueco, notando la lujuria de su mirada al voltear la cabeza, pero lejos de detenerse siguió con su labor, era un momento tan candente que le pareció interesante, dejándose llevar por la situación, siendo ella misma la que decidió empujar de manera repentina para sentir como entraba una parte de mi tranca.
-oh me vas a reventar. Tienes que sacarla…no puedo másss
Sus nalgas se apretaron, impidiendo que continuara, escapando de nuevo otro alarido. Pero era imposible, si le entraba más la iba a reventar.
-oh no puedo por favor sácala.. no puedo, me haces daño me dijo ella con decisión.
Salí de ella, ya que también la estrechez de su orificio me estaba doliendo.
Se giró y me dijo: - lo siento. La tienes muy grande no entra…. Me duele mucho…por atrás.
Pero, pese a ello, aquella mujer seguía muy caliente. Ella miró de nuevo mi pene que seguía con una empalmadura de caballo, observe sus ojos lujuriosos, y entonces hizo algo que me dejó anonadado: miro hacia una silla que había allí y me hizo sentar sobre ella, dejando mi verga erguida como un misil.
Creo que ella pensó que de esa manera pudiera montarme, pensando que en esa posición podría atacar aquella verga que le parecía como un reto para su coño, por el grosor y la firmeza, pero controlar la penetración. Sin poderse resistir mas, empezó a masturbarme, me tomaba con sus dos manos para poder ...
... abarcarla y por mas movimientos fuertes no lograba ni doblarla un poco.
No me había podido correr, por lo que estaba tan caliente y dura como al inicio. Ella procede a colocar sus manos sobre mi pecho levanto suavemente su pierna y se dispuso a montar a su caballo. Ella se colocó a la altura de la cabeza de mi mástil y fue bajando lentamente
-anda preciosa. Clava a tu potro… vamos tu eres capaz. Hasta la empuñadura… vamos Sofía…clávatela toda- le incite.
Aquello la enceló y mirándome a la cara, se fue dejando caer poco a poco, viendo como mi verga fácilmente le ocupaba toda la cavidad de su vulva. Notaba la estrechez de su vagina, pero ella no se rindió hasta que sus nalgas se posaran hasta tocar mis huevos, lográndolo por fin su objetivo de un fuerte sentón.
-ooooo me la he clavado todaaaaaaaaaaaaaa—oh papito como me abres…
Aquello le arranco un suspiro esta vez no tan doloroso como cuando se la metí por el culo, empezando la cabalgata subiendo y bajando lentamente desde la parte más alta hasta el fondo de sus entrañas, a un ritmo que aceleraba por momentos cerrando los ojos, tratando de embutir ese tremendo y grueso palo.
Mi polla entraba hasta el fondo, ya que se notaba que entraba tan ajustada que parecía que la panocha de Sofía se iba a reventar.
Para ella fue tanto el placer que termino por disminuir la intensidad de sus movimientos, doblarse hasta juntar su pecho con el mío, momento en que aproveche esto, para sujetándola por sus nalgas, apretarla ...