Scarlett, una pelirroja de ensueños
Fecha: 21/04/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos
... nombre, y con el contraste de su piel clara y sus escasas pecas en su rostro le hacían ver más que divina. Me pidió que le disculpara, pues me tendría que llevar por la misma ruta para no disparar los sensores de las cámaras cuando alguien se acercaba a la casa y que no quería crear ningún problema con su marido si se daba cuenta, pues me habló en algo de los celos de su esposo.
Entré a la cochera por una puerta trasera y verdaderamente el sensor del nivel de aceite estaba encendido, a lo cual le di solución en unos cuantos minutos. Scarlett se sorprendió por el poco tiempo que me tomó y para ver su disponibilidad actué como si me quisiese retirar y ella me lo preguntó:
- ¿Tiene prisa?
- Veo que luces divina y pensé que ibas a algún lugar.
- Bueno, me dirigía a darme un masaje, pero lo he pospuesto para dentro de dos horas debido a este inconveniente. ¿Quieres tomar algo, si es que no tienes prisa?
- La verdad que no tengo prisa, pero no te quiero poner en alguna situación incómoda con tu esposo… ¿Tendrá cámaras en su interior? – y Scarlett sonríe.
- No te preocupes, adentro solamente hay sensores de movimiento.
- Eso es preocupante y excitante… saber que movimientos haces y tienes.
- ¡Eres un loco! -me dijo y agregó. ¡Pensé que te ofrecerías en darme tú el masaje!
- Las ganas no me faltan, aunque quizá no sea tan profesional como la rutina a que estas acostumbrada.
- ¡Me parece bien! Me fastidian las rutinas… solo tengo una condición ...
... contigo.
- Dime. -le dije.
- ¡Que solo será un masaje! ¿Estás de acuerdo?
- ¡No hay problema! Estoy de acuerdo.
Me sirvió un jugo de naranja y me dijo que pasaría a prepararse y que subiera al segundo piso y que le diera unos cinco a siete minutos antes de subir. Subí con esa misma tensión que me da cuando sé que algo prohibido va a ocurrir, la adrenalina me recorre y hasta me pongo un tanto inseguro y nervioso, esa misma sensación que me dio la primera vez que me cogía a la primera chica en mi vida.
Escuché su voz que me dirigió a la habitación donde se encontraba. Era la única puerta que estaba medio abierta y entré con esa morbosidad de mi curiosidad. No era la habitación matrimonial, ni tampoco la cama era de tal tamaño. Las persianas estaban abiertas y pude observar que una ventana también estaba medio abierta y entraba una brisa y el canto de las aves de alrededor. Scarlett estaba boca abajo, se había colocado una toalla que cubría sus hermosos glúteos y en el buró cercano a la cama tenía un bote de aceite que ella misma señaló. Observé esas pecas rojizas que un día solo imaginé, esos vellos microscópicos que brillaban con la luz que entraba a la pequeña habitación y me contuve observando ese hermoso cuerpo y ese rostro angelical de esta preciosa mujer. Ella previó mi actuar vacilante, pues no sabía dónde empezar y me dijo: ¡Tony, comienza por donde tú quieras!
Dejé caer un poco de aceite por sobre su espalda, lo que hizo que su piel se erizara y comencé a frotar ...