Susana juguetona, ¿buena o mala?
Fecha: 28/04/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Me contacto a través de una página de contactos esta mujer que tenía 3 años menos que yo pero realmente como toda mujer tenía más experiencia en la vida. Lo hizo a través de un mensaje en donde me decía que deseaba que la conociera, tanto para saber si era buena o mala, aunque todo hay que decirlo, me encantan las mujeres que aun teniendo pareja desean experimentar su lado oscuro y provocador para deleitar su sexualidad al máximo.
Bien es cierto que cuando una mujer contacta con un desconocido lo primordial es primero el respeto y luego la discreción y como ella y yo necesitábamos ambas cosas, pues la respondí que yo era malo jugando pero muy bueno entre sus piernas, a lo que ella me respondió con otro mensaje para que quedáramos y viéramos si el juego de ser malos o buenos nos llevaba a divertirnos y así comprobar que nos atrae en temas sexuales, aunque ella ya lo ponía bien claro en su perfil, nada de dolor pero si mucha sensualidad y mucho sexo.
Susana (que no es su nombre real ni el de su nick) es una mujer en todas sus letras y cuerpo, rubia, pechos pequeños pero muy sensibles, un precioso culo y unos labios sin nada de pelo, vamos que tenía su coño para ser comido sin molestia de vello púbico y siempre húmedo al menos cuando quede con ella, que venía con un vestido holgado y sin nada debajo, solo unas medias que se unían a un body abierto justo entre su cueva y su culo. Lo que yo siempre digo sutilmente “una mujer preparada para que la follen en cualquier ...
... momento y circunstancia sin impedimento de ropa íntima”.
Quedé con ella cerca de la estación de autobuses de su ciudad, que es muy conocida, sobre todo porque al lado está un centro comercial con la estación del tren de alta velocidad y siempre que he visitado su ciudad me he alojado en un hotel cercano, por tanto, no es que me conozcan, es que soy cliente habitual por temas de trabajo. Reservé una habitación y tras tomarnos una cerveza a medio día que era cuando ella podía quedar, antes de la hora de la comida, le dije si deseaba que fuéramos a follar o que diéramos un paseo hasta llegar a la playa que está a una media hora andando de donde nos encontrábamos.
Realmente yo quería follar con ella, y Susana deseaba sentir mi miembro en su boca por lo que me dijo que lo del paseo mejor para otro día, que ya le había follado suficientemente la mente como para dejarlo en un simple encuentro de conocimiento y poner cuerpo a nuestros mensajes, por lo que pague la consumición que nos tomamos y nos fuimos para la habitación, tranquilamente, charlando. Cuando llegamos fue directa al grano. Se agacho casi en cuclillas y abrió la cremallera de mi pantalón sacando de dentro de mi bóxer ya mi polla dura y con ganas de entrar en algún agujero caliente, por eso la miro, me dijo que no sabría si le cabría en su boca y en un ademán de abrir todo lo que podía su boca, metió solo el capullo.
Hecho bastante saliva para poder lubricar y yo notando que seguía insistiendo por tragarse todo, le ...