1. El regalo: Un antes y un después (Vigésima quinta parte)


    Fecha: 09/05/2022, Categorías: Infidelidad Autor: DestinyWarrior, Fuente: CuentoRelatos

    ... sobre el escenario.
    
    —¡Gracias! Humm, que rico que sabe. —Le respondí sonriente a mi esposo.
    
    —¿Y por dónde iba? Ahh si, ya sé. Me hallé de pronto abstraída y con mis ojos bien cerrados, placenteramente dispuesta a recibir aquellas sensuales manifestaciones, cuando golpearon súbitamente a la puerta. Quizás debido a mis gemidos y pequeños gritos de placer, Hugo… mi jefe se dio cuenta de mi llegada y preocupado me preguntó desde el otro lado de la puerta que si me encontraba bien.
    
    —¿Hugo? —Se me salió de la boca su nombre, debido seguramente a aquella extraña familiaridad con la que le llamó mi mujer.
    
    —Sí mi vida, él. Nos asustamos las dos por la súbita intromisión y con las manos cubriendo nuestras bocas por las contenidas ganas de reír, le pedí entre susurros a mi conquistadora asistente que se escondiera en el baño y me acomodé el vestido con rapidez para abrirle un poco la puerta, pero él la empujó como con prisa y entró a mi habitación. Revisó el lugar con su mirada y volvió a preguntarme si estaba bien y que con quien me encontraba. Muy serio me tomó de los brazos y la verdad mi amor, sentí temor por su desconfiada y brusca reacción. En su actuar y en la voz percibí vestigios de… ¿Celos?
    
    —¿Y por qué celándote él? Acaso Silvia… ¿Existe entre ustedes dos algún acuerdo previo que yo no sepa? —Y mi esposa negando tranquilamente con su cabeza y lanzando lejos la colilla, terminó de un sorbo su aguardiente y mirándome fijamente, continuó sin responder con la ...
    ... claridad que me merecía, su ya no tan erótico relato.
    
    —Antes de responderle, posó la palma de su manos sobre mi frente, luego sobre mis mejillas con el dorso, como si de un examen médico se tratara. Se fijó que sobre la silla ubicada al lado de un pequeño escritorio en la habitación de aquel hotel, se hallaba el bolso rojo de Antonella y apoyado sobre el esmaltado jarrón con sus flores fucsias y blancas, estaba el móvil de mi asistente dejando escapar el rítmico sonido de una canción, alguna de esas que bailamos divertidas y sueltas en la discoteca. Hug… Mi jefe frunció el ceño y como si lo hubiera presentido, miró hacia el baño que tenía la puerta entornada y cuando iba a decirme algo, con la intención de dirigirse hacia allá, entró tu llamada y logré zafarme de sus manos para responderte. Y lo demás pues… Tú, lo creíste saber.
    
    —Muy telepático que soy. ¡Inoportuno y antipático también! —Le respondí a Silvia, entre tanto yo, daba por concluida esa lata de cerveza, apretando el aluminio con dolorosa fuerza, contenida por mi esa mañana, desde hacía un rato.
    
    Y el sonido de «I Found Someone» se escapaba por los cinco altoparlantes y el subwoofer del teatro en casa.
    
    —Al contrario, fue una llamada liberadora, al menos inicialmente fue eso lo que pensé, estando yo tan eufórica. Veras mi vida, yo realmente me sorprendí al ver que se trataba de una videollamada. Antes de contestar le pedí en dos oportunidades que se marchara, pero él desobediente, decidió sentarse en una silla ...
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