El Ayudante (Cap. 4): Comiendo a Seungyeon II
Fecha: 25/05/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: JoKe316, Fuente: CuentoRelatos
... entender, lo bien que nos llevamos las chicas y yo. Además fue tu líder quien entró aquí a buscarme." Tomó un puñado de la larga melena de la morocha y la obligó a levantar su cabeza del escritorio, haciendo que la sexy Idol suelte un leve quejido que rápidamente se perdió entre más gemidos. "Dile, Monkey, dile lo bien que nos llevamos tú y yo." Y una nueva nalgada con su mano libre, para acompañar sus palabras.
"Ah, ah, mhh, Yeeun-nhm," Seungyeon, con su rostro perlado en sudor, con mechones de cabello rebelde pegándose a su piel y su boca abierta cantando sonidos de puro placer, apenas si pudo abrir un poco sus ojos para ver a su rubia amiga. Aunque su mirada no pareció enfocarse en ella realmente, perdida en el goce del sexo. Su mente estaba nublada por la satisfacción, por el éxtasis sexual, y ya ni siquiera podía formular una frase coherente. "Yeeun, ¡Ahh! ¡Sí, sí!" Reducida a nada más que palabras sueltas que acompañaban el ritmo de las embestidas recibidas.
La rubia sólo tragó saliva al verla de esa forma, devolviendo su mirada a aquel detestable hombre, notando como los músculos de su trabajado torso se remarcaban y relucían bajo el sudor, y cómo las venas de sus brazos se detallaban aún más mientras sujetaba firme el cuerpito de su líder. Todos esos signos eran clara indicación de que estaba cerca de venirse, podía verlo, y esta vez no iba a contenerse como lo había visto hacer antes cuando estaban contra el ventanal. "Por favor..." Con mirada suplicante, la ...
... rubia se mordió el labio inferior, luchando contra las ganas de simplemente darle una bofetada a ese detestable hombre para borrar esa odiosa sonrisa de su rostro. Conociéndolo, eso sólo le gustaría, lo calentaría más. "Por favor, ¿No te corras dentro de ella?" Más un pedido, un ruego, que una demanda. Un pequeño puchero con sus labios acompañó sus palabras, intentando convencerlo al menos con su lado más tierno. No quería que llenara con su semen a su amiga tal como había hecho con ella horas atrás, a pesar de la increíble experiencia que había resultado ese acto para ella.
"Ngh," Gruñó como respuesta y la miró con evidente molestia, las venas en su cuello y frente marcándose más, sintiéndose cerca del clímax, subiendo la intensidad de sus embestidas.
La rubia sólo pudo sentir un ligero escalofrío recorrer su delicada espalda, la humedad en su propia intimidad haciéndose más caliente y evidente cuando la miraron de esa forma.
"Bien..." Arrugó el puente de su nariz y liberó de su agarre a la morocha, dejando que su cabeza vuelva a descansar sobre el escritorio mientras la embestía con incluso más fuerza, si eso era posible. "Arrodíllate."
La mirada que recibió de parte de aquel dominante hombre le dejó muy claro que no iba a esperarla por mucho. Así que Yeeun hizo caso de inmediato, todavía sujetando la camisa contra su pecho intentando ocultar lo que podía de su desnudo cuerpo. Quedó de rodillas frente a él, mirándolo todavía con el puchero en sus labios, pero ...