1. Los entrenadores sexuales (Parte 1)


    Fecha: 16/06/2022, Categorías: Intercambios Autor: Homelander, Fuente: CuentoRelatos

    ... sacarle la corrida a mamadas ¿Ok? — dijo Tiffany histérica buscando la cara de Franco.
    
    — Si — dijo igual de desesperado, pero sin dejar de ver el espectáculo ni un solo segundo — Se la tendrás que chupar más veces hasta que aprendas bien — le dijo ansioso a Luz, ella asintió viéndolo medio segundo y regresando a ver la verga de su amante.
    
    Braulio soltaba su verga y la metía desesperado en la boca de Luz, quien de inmediato abrazaba ese enorme pedazo de carne con los labios y lo rodeaba con la lengua, fue abrumador para ella, primero sintió como ese falo de carne se retorció en su lengua firmemente, se ponía tenso, más duro aún y en su lengua caía un espeso, caliente y amargo líquido viscoso, él gemía y la mantenía con fuerza con ambas manos en su lugar, luego la verga de Braulio se relajaba y volvía a tensarse furiosamente en su lengua y más de su asquerosa corrida le llenaba la boca, él gemía y se retorcía mas, luego de nuevo, luego otra vez, ella sintió el más grande asco que había tenido en toda su vida, no tenía la más puta idea de porque lo disfrutaba tanto.
    
    Afuera Franco vio como ella apretaba los ojos, se sostenía desesperada del trasero de Braulio, hacia caras de asco y sobresalía un pedazo de la verga de Braulio lo suficientemente grande para poder ver cómo palpitaba violentamente mientras la mayor parte estaba dentro de la boca de su novia que hacía las caras de asco mas obsceno que le había visto hacer.
    
    1, 2, 3... 4, 5... 6 violentas palpitaciones de ...
    ... la verga de Braulio que gemía escandalosamente y por fin parecía calmarse, sacaba su verga lentamente de la boca de ella, Luz echaba la vista hacia abajo y tragaba con enorme dificultad ese espeso atole amargo que tenía en la boca, los 3 la veían atentamente y cuando ella alzó la vista abrió la boca imitando el porno que había visto y todos reían un poco al ver su boca completamente vacía, aunque el sabor amargo y la sensación espesa no se iban. Braulio reía un poco y le pasaba la punta de la verga por la cara embarrándole esa última gota que siempre queda.
    
    — ¿Te gustó? — preguntaba el hombre de veintitantos con su viril voz.
    
    — Demasiado — decía honestamente la chica recuperando la respiración, volviendo a la realidad, de pronto parecía súper bizarro que la novia y el novio de ellos estuvieran viendo tan atentamente y se levantó enseguida para ir al baño.
    
    — Deberíamos irnos — dijo Tiffany ansiosa mirando a su novio guardar su verga.
    
    — ¿Y lo demás? — preguntó Franco nervioso.
    
    — Practiquen esto por mientras, luego él podrá enseñarle más ¿Ok? Si viste como ¿No? — le dijo rápidamente a Franco mientras abrazaba a su novio ¿Ella estaba celosa y quería huir de esa locura? ¿O necesitaba ser follada como perra inmediatamente?
    
    — Si, ok — decía Franco aún aturdido por todo lo que había sucedido.
    
    Franco acompañó a la pareja a la puerta de salida, Braulio le lanzó una sonrisa socarrona al final, Tiffany una sonrisita pícara de complicidad. Cuando él regresó al cuarto, ...