1. Morbo con mi hermana y mi marido


    Fecha: 17/06/2022, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Mayse, Fuente: CuentoRelatos

    ... tragues toda, sin dejar una gota.
    
    La polla de Ton, sin salir de la boca de Ali, empezó a escupir semen sin parar. Ella se esforzó para no dejar escapar nada. Cuando le dejo la boca libre, Ali se levanto en dirección al lavabo.
    
    ― ¿A dónde vas?
    
    Ella hizo gestos indicándole que tenia la boca llena de semen y quería escupirlo.
    
    ― NI hablar. He dicho que quería que te lo tragaras todo.
    
    Ali abrió los ojos como platos. Después me explicaría que si bien se la chupaba a su marido, jamás se había tragado su leche. Me busco con la mirara para que la ayudará, pero yo dije:
    
    ― Dijiste quiero ser usada y follada duro. ¡A tragar¡
    
    Y trago hasta la última gota. Y solo seria una pequeña parte de lo mucho que trago aquella tarde.
    
    Después de que mi marido Ton le follase la boca y le obligara a tragarse su leche, mi hermana Ali estaba estirada en la cama recuperándose y acariciándose suavemente el coño. Yo, sentada en el sofá, noté que mi entrepierna estaba mojada. La mamada me ha había puesto caliente. Ton, sentado a mi lado, ordenó:
    
    ― Ali, veo que tienes ganas de acariciarte. Siéntate en esa silla delante nuestro con las piernas abiertas y mastúrbate mientras hablamos.
    
    Ella arrastro la silla cerca del sofá y poniendo una pierna en cada brazo se expuso abierta, mostrando su coño ya claramente mojado. Con un dedo se acariciaba el clítoris.
    
    ― No ha estado mal la mamada. ¿Se la chupas mucho a tu marido?
    
    ― Algunas veces, pero no es que me lo pida mucho.
    
    ― Pues ...
    ... él se lo pierde. ¿Te ha puesto cachonda lo que hemos hecho?
    
    ― La verdad es que si. Sentir que me obligabas a chupar me ha excitado mucho.
    
    En ese momento, de la habitación de al lado llegaron claramente los gritos de la pareja que estaba follando:
    
    ― ¡Si, dame fuerte, reviéntame el culo, más, más!
    
    ― ¡Toma zorra, toma polla, tómala hasta el fondo!
    
    ― ¡Me corro cabrón, me corro, sigue, sigue!
    
    Los tres sonreímos. Ton, levantándose hacia mi hermana dijo:
    
    ― Lo ves. En el sexo es importante soltarse y desinhibirse. Y a ti de veo muy cortada. Deberías ver a tu hermana Mayse, tan discreta, pero en la cama se suelta y se transforma.
    
    Yo pensé que no había para tanto, aunque era verdad que él conseguía muchas veces que dijera barbaridades mientras follábamos.
    
    Ton empezó a acariciar con toda la mano el chocho de Ali.
    
    ― Te voy a regalar el primer orgasmo de la tarde. Pero con la condición que te dejes ir y te portes como la guarra que eres. Si no, pararé. Y para hacerlo más divertido, será tu hermana la que elija la manera. Yo, mirando a Alí, solté:
    
    ― Cállate y cómele el coño de una vez. Tanta charla y ella muriéndose de ganas.
    
    Dicho y hecho. Ton se arrodilló y poniendo la cabeza entre las piernas de Alí empezó a lamer. Aquel coño hacia rato que palpitaba y mi hermana comenzó a gemir automáticamente, agarrando con sus manos la cabeza de Ton y apretando contra ella.
    
    Aquello fue demasiado para mí y disimuladamente empecé a acariciarme un pezón metiendo mi ...