Me la cogí por una apuesta
Fecha: 12/07/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Panda_abr, Fuente: CuentoRelatos
... realmente hermosa y de la contadora que iba a la oficina no quedaba nada, se había transformado en una mujer sexy que todos los hombres en el restaurante volteaban a ver.
Nos tomamos un cocktail de entrada, una botella de vino francés y para finalizar dos copas cada uno de licor 43. La combinación y cantidad de tragos hizo que la plática fuera sobre temas sexuales que hicieron más íntima la conversación y casi para finalizar la cena nos fuimos acercando, hablando cada vez en voz más baja, hablándonos muy cerca, sentíamos el aliento de cada uno en los labios, le tomé la mano y me acerqué para darle un beso, suave, delicado, intenso pero corto pues el lugar no se prestaba para mucha pasión, nunca pensé que ella tuviera ganas de estar conmigo así, pero después de la sorpresa lo empecé a disfrutar todo muchísimo.
Le propuse irnos a "otro lado" y ella aceptó, pedí la cuenta y nos fuimos de ahí, salimos del restaurante como si fuéramos novios, agarrados de la mano y cuando nos subimos a mi carro, ella se acercó y recargó su cabeza en mi hombro.
Nos fuimos a un motel donde cada habitación tiene estacionamiento para el carro y cuando llegamos me dijo que pidiera otras copas de vino, pedí una botella que llegó rápidamente y nos sentamos en una mesa que tenía la habitación y cuando comenzamos a tomarnos la primera copa ella puso música y comenzó a desnudarse lentamente, se quitó las zapatillas, luego una a una se despojó de las medias negras y bajó los tirantes del vestido, ...
... se acercó a mi y me besó, ahora sí un beso lleno de excitación, largo, nuestras lenguas se encontraron por primera vez luchando por tocarse, por abrazarse y con un movimiento dejó caer el vestido quedando solamente en una tanga azul de encaje que la hacía verse preciosa, su piel morena, sedosa, increíblemente aromática, invitaba a tocarla, la acaricié toda de pie, le besaba el cuello y cada vez que lo hacía se estremecía, la voltee con su espalda hacia mi y comencé a lamerla, el cuello, la espalda, tocaba sus pechos duros y sus pezones parados, mientras ella pegaba su cuerpo al mío y se acomodaba parando las nalgas para sentir mi verga en la raja de su trasero.
Comencé a bajar lamiéndola con la punta de la lengua, disfrutando su sabor, era intenso, salado, diferente, sentía los vellos suaves de su espalda erizados y llegué a sus nalgas, fui bajando su tanga hasta que la saqué por sus pies y comencé a morder suavecito sus nalgas, las abrí, lamí su culo y cada vez que pasaba la lengua por su ano temblaba.
No decía nada, solo gemía despacito como si quisiera que nadie oyera como disfrutaba. La voltee y la besé en la boca y fui bajando hacia el cuello, masajeaba sus pechos y comencé a lamerlos y morderlos suave y ella entre gemidos me dijo -¡¡¡muérdelos fuerte!!! y yo obedecí y al morderlos ella se excitó mucho más, me agarraba la cabeza y me apretaba a su pecho para sentir más mis dientes puso su mano en mi cabeza y me dirigió hacia abajo, en ese momento me di cuenta que ...