Sergio y Elena siguen entre fantasía y realidad
Fecha: 21/09/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Vanesa y Sergio, Fuente: CuentoRelatos
... cama, está a cuatro apoyada en la cama y una vez más mi polla se introduce en su coñito y empiezo a entrar y salir mientras le doy unos azotes, ella se ha vuelto a correr y yo vuelvo a estar apunto, no sé como pero aguante. Creo que es el momento de que sea ella quien tome las riendas porque es cosa de los dos.
Le doy la vuelta, la cojo de la mano y la llevo al mueble, nunca recuerdo su nombre, me tumbo y la miro a los ojos mientras la digo, “hazme el amor, soy tuyo” Elena se pone sobre mí y se introduce mi polla, empieza a subir muy lentamente, a girar sobre mi pene, a besarme a comerme el cuello, a morder mi labio, todo mientras sube y baja sobre mi polla. Sus ojos me lo dicen todo, esa mirada me vuelve loco, ver como se balancean sus pechos me lleva casi al estasis, escuchas su voz mientras me mira y mientras hacemos el amor me obliga a cerrar los ojos a tratar de distraer mi mente para no correrme como un adolescente. Noto que ella va rápido, me noto muy duro, sé que se va a correr, me mira a los ojos y me dice “vamos córrete conmigo, no te aguantes”. No puedo más y ambos nos corremos a la vez, confundiéndose nuestros gritos en uno solo. Elena cae sobre mi pecho, con mi pene todavía en su interior, seguimos besándonos, diciéndonos cosas que son sólo nuestras, así seguimos durante varios minutos.
Al final nos levantamos y nos duchamos juntos, fue una ducha tranquila, con muchas caricias que volvieron a ponerme en forma, pero era hora de otra cosa y así te lo dije, ...
... viendo en tus ojos que mi negativa a volver a hacer el amor te ha descolocado pero eso es parte de esta noche tan especial, descolocarte.
S: Vamos a vestirnos, hay que cenar,
E: jooo
S: Tranquila, la noche es larga (mientas salimos, abro la maleta y Elena empieza a vestirse)
E: Sergio, ¿hay que cenar?
S: Si, jajaja, hay que cenar. Por cierto, ponte esto (mientras te doy un paquete)
E: ¿Y esto?
S: Un regalo, ábrelo
E: Ostias!! Es precioso, te has pasado, esta vez te has pasado mucho
S: Póntelo, hoy eres mi chica
La verdad es que te queda de maravilla, todo merece la pena contigo, tu mirada dice cada vez más cosas que me encanta ver, que me encanta buscar. Salimos y fuimos a un restaurante de la plaza, tras pedir la cena:
E: De verdad eres la leche
S: Tu sí que eres increíble, por cierto, se me había olvidado esto (mientras saco un paquete)
E: Pero Sergio, más cosas, esto ya es demasiado
S: No te preocupes, ya no hay más. Por cierto, no lo abras, ve al baño y ábrelo allí.
Te quedas blanca, creo que sabes lo que es pero no estoy seguro, me miras a los ojos, te levantas, te acercas hacia mí, me das un beso muy dulce mientras tu mano me soba ligeramente el paquete, me dices “mi niño quiere jugar un poquito pues su chica dice que a jugar”. Te giras y vas hacia el baño.
Este relato tiene una parte de realidad y una parte que es fantasía pero hoy estoy de niño malo, acabo de tener una conversación con Elena que me ha puesto muy caliente, ...