Infidelidad con mi cuñado camionero (Parte 2)
Fecha: 06/10/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Nora, Fuente: CuentoRelatos
... Luis, ella también estaba algo pasada de tragos e invitaba a José a la recámara para echarse un polvo rápido y luego volver a la fiesta, pero José la rechazaba diciendo que aún tenía que picar más hielo y por un costado podía ver como Belén le agarraba la verga a José por encima de su pantalón, pensé “esto no puede ser, ella es mi hermana y no le puedo hacer esto, además no sé qué rumbo tomaría todo si traiciono la confianza de mi familia” y cuando ya me disponía a volver al deck con los demás escuché a Belén salir de la cocina con un vaso de whisky en la mano y tarareando la canción que estaba sonando en ese momento, de inmediato sentí unas manos que desde atrás me rodeaban la cintura, era José…
José Luis: pensabas escaparte mi cuñadita deliciosa? Qué tal si me das un beso y me dejas disfrutarte unos minutos…
Todo se me nubló de nuevo, me di vuelta, me abracé a su cuello y nos besamos, jugábamos con nuestras lenguas y mientras mis manos tomaban su rostro en señal de entrega total, José levantó mi falda y palpó la piel de mi culo y con sus dedos recorrió la costura de mi tanga que con la falda subida se podía ver todo pues era semitransparente…
Yo: Te gusta? vas a tener que hacer algo para quitarme esta calentura, es tu culpa.
José Luis: te quiero meter mi verga, quiero penetrarte toda, quiero dejarte marcada como mía
Nos volvimos a besar y yo le tocaba la verga a José por encima de su pantalón.
Yo: Que tienes ahí? Es para mí?
José: si mi amor, esta ...
... verga es toda tuya, que tal si me regalas una mamada?
Yo: pensé que nunca me lo pedirías, me muero por probarte esa verga rica que tienes.
José: y tu no sabes como he soñado este momento, ver tu boca llena de mí.
Me senté con prontitud en una caja de cervezas y le bajé la cremallera pues no había tiempo que perder, además alguien podría entrar a la cocina y vernos, apenas tuve esa verga en mis manos pude constatar lo que a veces me comentaba Belén y es que José tenía una verga grande y gruesa y yo ya me la quería comer, comencé pasándole la lengua por todo el glande y de inmediato me la metí a la boca, estaba deliciosa, con las venas marcadas, José me cogió del pelo y eso me calentó más….
José: ummm chúpamela amor, que rica boca tienes, déjamela brillante de tu saliva, tienes hambre? Come mi amor, come.
Yo: que verga tan rica cuñadito, es más grande que la de mi marido, que rico!!! Tienes que compartirla más seguido.
José: cuando quieras amor, cuando quieras me llamas y vuelvo para que la chupes así de bien como lo estás haciendo, tu si sabes dar una buena mamada… que cuñada me gasto por Dios.
Se la chupé todo lo que quise, mi boca quedó marcada por esa verga deliciosa, si mi hijo supiera que sus temores se estaban haciendo realidad, que su madre se estaba dejando comer por el cuñado, le chupé los testículos pero de inmediato volvía a esa rica verga que ya denotaba su temple y su disposición para penetrar una vagina y yo me sentía honrada de ser la poseedora ...