Verano de 1998, mas que amigos. (III) - Relatos Eróticos

Verano de 1998, mas que amigos. (III)

... su lengua iba lamiendo el cuello de nuestra musa, ella aceleraba el ritmo de sus dedos sobre su coño, y su culo no paraba de pedir rabo, el amigo de Neus tenia una gran erección, toda su verga estaba presa dentro de su ropa pero podía verse que su polla era gigante. Yo no daba crédito a lo que veía, estaba excitadísimo, tenía frente a mi a la tía mas buena que conocía y la iba a ver follar, mi pantalón no soportaba mas presión, y el de David tampoco, estábamos tan cerca que nuestras piernas y brazos se tocaban, notaba su movimiento, me giré a mirarlo y él ya tenía su polla fuera, erecta, con todo el glande mojado, subía y bajaba su piel con suavidad, yo me saqué mi polla y empecé mi paja. Neus como si le hubiese dado un espasmo se deshizo de las manos de su compañero, se dio la vuelta y con cara de lujuria se arrodilló hacia la gran polla que se podía percibir, sin pensarlo, con sus manos iba pajeando por encima de la ropa a su amigo que ponia una gran cara de satisfacción, Neus no paraba de mover sus manos por la polla hacia arriba y hacia abajo, tampoco dudó en lamer y mordisquear esa gran sorpresa atrapada en la lycra, joder. quien pudiese tener la boca de Neus en su polla y joder. quien pudiese lamer aquel trozo de tela. David lamia su mano para lubricarla bien y darle duro a su polla, eso me hizo recordar que tenía mi crema hidratante, cogí mi mochila y la saqué. -Hey Deibid. - dije susurrándole - quieres crema? -si tio. echame. Él me ofreció su polla, yo con la punta ...

... de la botella le cubrí su pene, le puse una buena cantidad de leche hidratante blanca, empezó a restregar su mano, cerraba los ojos de placer y volviá a mirar a Neus, me heché crema sobre mi polla y volví la mirada a nuestra ninfa. Ahí estaba de rodillas, con sus pechos firmes al aire y su sonrisa picarona desnudado a su amigo, dejando libre una polla enorme, depilada y con unos huevos colgantes grandes y hermosos, ella miraba fijamente lo que tenía delante, sacó la lengua húmeda y empezó a lamer los genitales de su hombre, empezó por los huevos, subía lentamente por la parte baja de la polla, y al llegar al glande no se lo pensó dos veces, y empezó a besar la seta morada y grande, llena de su liquido precum. Tenia mi boca hecha agua, y mi polla me dolía de lo fuerte que me estaba pajeando, sentía además los movimientos de David, su vaivén, su olor, giré mi vista, quería ver su polla, estaba blanca de la crema, grande y dura, él me miraba y sonreía, dejó de pajearse, sacó su mano mojada de liquido y crema del tronco de su polla, mirándome fijamente a los ojos y sonriendo de oreja a oreja me cogió mi polla, empezó suavemente a subir y bajar mi piel, yo no lo dudé y puse mi mano en su pene, estaba caliente, duro, muy duro, sonreíamos nos mirábamos las pollas y nos pajeabamos duro, un gemido hizo que volviésemos nuestra vista a Neus. Allí estaba a cuatro patas con las rodillas y los codos en el suelo, su coño estaba siendo fuertemente follado por el amigo misterioso, la embestía ...