La espiral del deseo, prólogo
Fecha: 31/10/2022,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... es lo que parece... Bueno dicho así si, pero de verdad que no. No hemos... (Me di cuenta de que da igual lo que le explicase, así que solo le dije la verdad). Mira, hemos estado viendo porno como parte de mi teoría, así que los gemidos son de las películas.
- (Se echo a reír) Tranquilo. Si ya lo sabía, o bueno, lo intuía. Los métodos de la señora Sofía suelen ser así de pintorescos. No te preocupes.
- Mientras funcionen, haré lo que sea. En fin, me voy, hasta la semana que viene....
- Miriam, me llamo Miriam. Nos vemos Víctor.
- Chao Miriam.
Y así concluye mi primer día de terapia. Digamos que está ha sido la introducción, pues tenía que poneros en situación antes de empezar con... Bueno ahora lo veréis.
Llegó la semana siguiente. Misma hora, llegue de nuevo puntual, y allí estaba de nuevo Miriam esperándome en la puerta. Me encantaba que me fuera a recibir, pues así podía deleitarme con su enorme culo, que apenas entraba en los vaqueros que llevaba.
Al ir a entrar al despacho de Sofía, Miriam se me acercó sonriendo y me dijo al oído "Toma, por si la película se pone interesante", y me dio un paquete de pañuelos. Me quedé con ganas de entrar al juego, pero tenía que entrar. Una vez en el despacho con Sofía, repetimos la sesión anterior. Fueron pasando escenas que no me excitaba en absoluto, pero lo que sí pude notar es que Sofía cada vez fruncía más el ceño...
A mitad de sesión, algo cambio. Ella estaba sería. Cogió el mando, y cambio de película. ...
... En pantalla aparecían 2 chicas gorditas, haciendo un 69. Me puse un poco nervioso, y más cuando, escena tras escena, eran todas de sexo con gordas, a cada cual más gorda que la anterior. Si hubiera estado en mi casa ya me estaría pajeando como un mandril, pero allí, al lado de Sofía, la verdad ni se me puso dura. Solo podía pensar en cuanto quedaba de sesión para irme.
De repente, Sofía cambio una última vez de escena, en la que una mujer gigantesca, completamente desnuda, le estaba haciendo un facesitting a un hombre. Tras unos segundos, Sofía se levantó del sofá, y me dijo totalmente enfadada.
- Le dije que no me mintiera.
- No entiendo...
- Se ha masturbado, a que si, Víctor.
- Bueno yo... Si, pero no habíamos dicho de tutearnos?
- No me saltes con eso. Es cierto, pero estoy tan enfadada que me da igual. Odio que me hagan perder el tiempo. Si no va a hacer lo que le digo, mejor váyase.
- Espera. Está bien te juro que para la próxima semana no lo haré. ¿Podemos seguir?
- Pues no, no podemos a causa de tus actos. La sesión entera está arruinada, ¿Y tú esperas que me quedé aquí esperando otra semana a ver si el señorito viene con las pilas puestas? No señor. Si quieres que continuemos, tendrá que ser a mi manera.
- Está bien está bien. Perdón. Lo haremos a tu manera. Por favor, no se ponga así. ¿Que quieres que haga?
- Desnudate.
- Me niego.
- ¿Lo ves? Cada vez que te digo algo que avanzará en la terapia, vas tú y haces lo que quiere. Mira ...