Soledades compartidas
Fecha: 13/12/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: SexNonVerba, Fuente: CuentoRelatos
LAURA
Salí de su departamento a escondidas, como una delincuente, secándome una vez más, las lágrimas de la culpa con el dorso de la mano. Pero estas serían las últimas. Hoy me juré a mí misma, después del tercer y más intenso orgasmo, que ya no volvería a verlo jamás.
Esta vez va en serio. Estoy dispuesta a recuperar mi matrimonio.
Desde el nacimiento de Luca, hacía ya casi tres años, las cosas habían cambiado para nosotros. El sexo conyugal había ido transformándose en un ejercicio monótono y esporádico, cada vez más esporádico. Nunca antes en mi vida habría siquiera imaginado la posibilidad de ser una mujer infiel. Yo no era de esas. Esa no era yo. Pero lo cierto es que lo fui, lo soy. Desde hace un año atrás nos vemos cada viernes y él me hace gozar como hacía tiempo no gozaba. No siento por él más que deseo sexual en la forma más animal de la palabra. En él no encuentro más que una descarga física, eléctrica. Ni siquiera es mi amante porque nada relativo al amor tiene que ver con él. Él es su polla, sus dedos, su lengua...
RAÚL
No era la primera vez que lo hacía en el baño público del ministerio y la verdad es que no era por morbo sino por imperiosa y humana necesidad.
Estuve frente al ordenador casi sin poder concentrarme en todo el día. Estaba caliente como una mula. Todas las mujeres que pasaban frente a mis ojos me parecían una ostentación de lujuria insoportable. Antes de marcharme del ministerio, pasé por los servicios y me hice una paja en el ...
... lugar de siempre, el privado más alejado de la puerta.
Luego de la descarga venía inmediatamente el alivio y la frustración como sensaciones simultáneas y complementarias.
Una vez más volvía a casa pensando que toda la maravillosa magia que había traído nuestro hijo, nos había planteado una paradoja conyugal que no podíamos o no sabíamos resolver. No recordaba la última vez que habíamos follado, pero sin dudas no había sido en el último mes. Tuvimos algunos intentos frustrados, algunas veces por sus jaquecas y otras por mi falta de... como decirlo... de motivación. Sin eufemismos: no había conseguido que se me levante.
Muchas veces pienso en la posibilidad de conseguirme una amante, al menos hasta que esta situación mejore, pero siempre termino en lo mismo. Laura no lo soportaría. Ella no sería capaz de hacerme una cosa semejante y tampoco lo toleraría en mí.
LAURA
Retiré a Luca de la guardería tratando de evitar a los otros padres que se acercaban amablemente a saludar. Sentía que cualquiera que se acercara lo suficiente podría advertir el hedor a sexo que llevaba encima.
Me duché apenas llegué a casa. Raúl llegaría del ministerio en media hora. Estaba dispuesta a tomar cartas en el asunto de la recuperación matrimonial y tenías un plan para esa misma noche de viernes. La verdad era que todavía estaba encendida y no quería dejar apagar la última lumbre que ardía dentro de mí.
Mi amiga Jimena tenía dos niños pequeños y todos los sábados por la noche los ...