Del paro a la esclavitud - Relatos Eróticos

Del paro a la esclavitud

... Ahora me toca disfrutar a mí.

Se sacó su horrible braga negra, dejando al descubierto un pubis rasurado y bien cuidado, que contrstaba con su aspecto exterior dejado y descuidado. Arrastarndome se sentó en el sofá acomodandose de tal forma que su coño quedaba accesibel a mi cara.

Empujando mi cabeza, todavia agarrada por los pelos la hundió en su entrepierna, el olor a sexo de mujer me entró hasta las entrañas, mezclado con el sudor se combinaba en un olor extrañamente agradable y erótico

-Vamos…así..asi…zorrita…usa tu lengua.

Lameteé el coño de Claudia con mi lengua sin saber muy bien que hacer, intenté recordad que parte del mio era mas sensible a estas practicas…ohh dios…estoy pensando en darle placer, no me lo puedo creer, realmente quiero agradarla, después de haberme pegado, follado y humillado aún pensaba en satisfacerla.

Cuando pude separar sus labios y notar el hueco que dejaban en su interior introduje mi lengua en su jugosa vagina, cuando me empujaba la cabeza tenía dificultades en respirar, mi nariz chocaba con su cuerpo e intentaba echarme hacia atrás para respirar.

-Asii…ummm…que bueno…estas echa una lamecoños profesional…

Sus últimos jadeos los acompañó de un último empujón de mi cabeza hacia su interior al tiempo que sus piernas abiertas se cerraban apretujando mi cabeza.

Con la misma fuerza que me empujaba hacia ella me apartó de su coño, levantandose me miró yo todavía de rodillas, mientras recogia su braga del suelo y se la ...

... ponía.

-Venga adecentate, pareces una fulana.

Vergonzosamente recogí mis braguitas mientras con un pañuelo limpiaba mis labios y mi cara empapadaos de líquidos.

Una vez vestida Claudia encendió un pitillo, rodeó la mesa para guardar el consolador.

-Vamos a ver Loli, tu tienes claro lo que ha pasado hoy no?

-Bueno, pues si.

-Vale, sabes que esto no va a ser cosa de un día, te quiero para mí, tendrás que pensarlo. Pero también piensa que la decisión que tomes va a condicionarte muchas cosas.

-Toma.

Me acercó dos sobres cerrados y un paquete.

-Leelos con calma en tu casa y toma la decisión que creas conveniente. Mañana es sábado tomate el fin de semana para pensarlo, o no, ya lo sabremos.Adios. Y lávate la cara tienes todo el rimmel corrido.

Salí de la oficina, abandoné el edificio, miré de reojo al portero intentando ocultar mi cara, la vergüenza me comia por dentro, la sensación de mierda que tenía en la cabeza, como decía Claudia de zorra, mi trabajo o mi dignidad eso era lo que habia querido decir Claudia. La denuncio? Pensé, y…que?, me tomarán por loca, claro que pude evitarlo, por que no le paré los pies, oh dios, por que me gustó, por que realmente me gustó.

En el coche mis pensamientos me volvian loca, no podía concentrarme en conducir, paré el coche un par de veces e incluso pensé en no moverme. En casa solo quería ducharme, sacarme su olor, borrar las huellas de todo lo que había pasado, pero en el fondo joder, me habia gustado. Bajo el agua, ...