1. Dama y hembra sensual


    Fecha: 02/02/2023, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Lobo Amarok, Fuente: CuentoRelatos

    ... lento, despacio, sin prisa intenso; las piernas de ella temblando, enardecida, dispuesta a eso y a mas, ya no tiene temor… el efecto del licor, sabroso, el olor, el ruido-música-todos sus sentidos sensibles; sus gemidos no son protestas: inspiración, pasión, pasaporte al éxtasis, música angelical!
    
    Furiosamente con ímpetu, tomando la hembra que le han encargado; la toma, la admira, la domina, la guía a sensaciones que hace horas eran desconocidas a su cuerpo.
    
    Ella le pide que no pare, se lo exige, se lo suplica!
    
    Sin salir de ese panal, empujando hasta al fondo le susurra a su oído, ”lo quieras, Chiquita, lo que pidas, hoy estas aquí, eres Mía.”
    
    “Toda la noche, dice ella “ahh que delicioso se siente!”
    
    Tremendo jadeo, tremendo el ritmo, el sonido.
    
    Él le dice, “así,” muévete mas rápido, “ya no extrañas a tus esposo! Cuando amanezca y ya este sobrio, va salir a buscarte y vas a tener que dar explicaciones, o te mandas sola?”
    
    “Eso será después, en este momento él no está aquí, hablemos de nosotros, solo estas tu y yo.”
    
    “Coqueta, me encantas, no pierdes tu tacto y tu diplomacia tenemos libertades ambos!”
    
    Ella siente su erección, su fuerza, su flor abriéndose tal como es-flor de labio en primavera, su miel derramándose.
    
    Y el admirando su espalda sus piernas, todo su cuerpo, ahora es el quien la tiene bajo su embrujo!
    
    “Ahhh no es que queja pero es tiempo de dar lugar a lo que sigue… esto es todo lo que quiero yo, pero, Manuel…”
    
    “Cállese y quédese ...
    ... ahí dama hermosa. Epaaa. Así muévase otra vez!”
    
    Sale y abruptamente, y le pone una nalgada, dos, tres fuertes.
    
    Ella se ríe, y le dice, “cabrón, cruel, duele, pero que deliciosa sensación… salvaje!”
    
    Él le da vuelta y con su misma camisa, la venda, la pone boca arriba… cazador y presa en un juego erótico, sonidos de la media noche, tintes de oscuridad, la dama buena y el seductor en armonía.
    
    Sin saber que sigue, ella le pregunta excitada…
    
    “Que vas a hacer?”
    
    “No te preocupes, te va gustar, o así te cogen en casa?”
    
    “Jamás.”
    
    “Así querías, así lo necesitabas, así lo pide la hembra que llevas adentro… te ha sorprendido tu misma, la hembra le ha ganado a tu sensatez, no es cierto?”
    
    “Claro. Ambas, un brindis a las dos!”
    
    Vendada, la besa en los labios, chupa su lengua, su estómago; lentamente baja a sus muslos, a sus costados, a sus pies, a sus uñas rojas… a sus bello pies.
    
    El olor a aceite la vuelve a hacer sentir más fuera de sí.
    
    Embriagada de deseo, y de placer -de ansiedad, combinación rara; un éxtasis que la pone fuera de sí.
    
    El la admira transformada y no deja de acariciarla, de tocarla de chuparle toda la piel preguntándole:
    
    “Donde te calienta más? Dime… dame acceso a tus rincones más sensibles, a tus pensamientos más prohibidos!”
    
    “Ahí, así, ahí nuevamente, ahí sigue, no te detengas, bésame, chúpame, cómeme, lámbela toda, así -tu sabes, ahí pudiese llegar a la cima, ahí!”
    
    “Continua, y dime lo que le has ocultado a tu esposo, es ...